Hace unos días, un grupo de tres jóvenes del sector de Las Cuadras, al sur de Quito, fueron captados tirando un colchón viejo en un botadero de basura municipal, de aquellos contenedores instalados por el Municipio en cada sector para que la ciudadanía lance los desperdicios de sus hogares. Sin embargo, pese a que el objeto no entraba por su tamaño, lo dejaron a medio ingreso del recipiente.

Y así, muchas más personas en el Distrito Metropolitano optan por botar o dejar en la calle tereques, para que el servicio municipal de recolección de basura se los lleve.

Aquello no es permitido. Desde hace varios años en Quito rige una ordenanza municipal que regula la recolección de escombros y objetos voluminosos. “Es responsabilidad de los productores de escombros su recolección, transporte y disposición final en las escombreras autorizadas”, reza el artículo 39 de la Ordenanza 332 de 2010.

Sin embargo, ¿cuáles son las escombreras autorizadas?, ¿dónde están ubicadas? Francisco Poveda, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo de Quito (Emaseo), explica que el servicio es ofrecido por la misma empresa sin costo alguno, pero la ciudadanía debe trasladar los artículos a uno de los dos puntos que tienen de recolección en la ciudad. Uno está en las oficinas de la empresa en la avenida Occidental y el otro en el barrio La Forestal, sobre la avenida Simón Bolívar.

Esa información es desconocida por Alicia Benavides, una ciudadana que vive en el sector de El Placer y desde hace dos semanas quiere deshacerse de un colchón viejo, pero no sabe cómo hacerlo. Conoce poco del llamado ‘Domingo de tereques’.

“De aquí hasta la Occidental una camioneta me costará unos 10 dólares. Está un poco lejos. Por eso aquí los vecinos optan por dejar los artículos viejos en la calle, para que solo se los lleven los chamberos, o si son electrodomésticos esperan a que pase un señor que compra esos aparatos”, comenta.

Poveda reconoce que la ciudadanía no tiene el hábito de trasladar dichos tereques hasta estos lugares. “Ese servicio es especial y diferencial. Se presta solo los domingos de 08:00 a 14:00”, señala. Es solo un día a la semana, porque a decir del titular de Emaseo, no se cuenta con las maquinarias y equipos suficientes para hacerlo todos los días.

Desde enero hasta abril de este año se han recaudado alrededor de 425 toneladas de tereques. Ante la falta de conocimiento de los quiteños, se trabaja en una campaña educativa comunicacional para difundir información sobre este servicio. Se espera que esté lista a fines de julio.