Paola Roldán, quien impulsó la despenalización de la eutanasia en Ecuador, falleció el 11 de marzo de 2024 debido a complicaciones en su salud. 

Tras el deceso, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, afirmó que su familia recibirá la mención de honor ‘Marieta de Veintimilla’, por servicios relevantes a la ciudad.

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En su cuenta de X expresó sus condolencias y escribió: “Una mujer extraordinaria que pudimos conocer por su valentía y su incansable lucha a favor de la vida, de la vida digna. Su historia resonó en muchas personas cuyas vidas están marcadas por el sufrimiento diario, encontrando representación en Paola”.

La mención de honor ‘Marieta de Veintimilla’ se otorga a personas o instituciones que que has brindado servicios relevantes a la ciudad.

Con su incansable lucha, Roldán, de 42 años, logró que se legalice la eutanasia en el país con la histórica sentencia emitida el miércoles 7 de febrero pasado por la Corte Constitucional, que falló a favor de su demanda y reconoció su derecho para tener acceso a una muerte digna.

Paola padecía esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad degenerativa sin cura. Tenía el 95 % de discapacidad debido a la enfermedad que le fue diagnosticada hace tres años. 

La mujer solo podía mover los músculos de la cara y los ojos, pese a que su cerebro funcionaba absolutamente bien.

Roldán empezó a sentir los estragos de ELA en agosto de 2020. Cuando hacía yoga, uno de sus brazos colapsó y cayó al suelo; luego tuvo dificultades para manejar su mano y tomar objetos tan rutinarios para una madre como el biberón de su bebé.

Después caminaba con dificultad y los médicos en Ecuador le hablaban de exceso de actividad, ejercicio y estrés. Sin embargo, en Estados Unidos le diagnosticaron la ELA.

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