En la plataforma X (antes Twitter), el usuario Paúl Caisapanta alertó en su cuenta que el conductor de un bus estaba en aparente estado etílico manejando la unidad. “Por favor, su ayuda. Está sentido sur - norte por la teniente Hugo Ortiz, rumbo a la maternidad”.

La publicación llegó al alcalde de Quito, Pabel Muñoz, quien etiquetó la misma a la cuenta de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT).

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Horas más tarde la institución informó en la misma red social que el conductor del bus fue detenido. En estado etílico les dijo a las autoridades que “solo salí a dar un par de vueltas. Los pasajeros no se dieron cuenta. Ayúdeme, jefe”.

Los agentes le hicieron la prueba de alcohol y se percataron que superó el límite legal permitido de gramos en la sangre. Tenía 1,83 cuando lo legal es hasta 0,2. 

Según la normativa de tránsito, las personas que infrinjan la ley de esta manera tienen una pena privativa de 90 días más la suspensión de la licencia por 60 días.

Finalmente, el usuario que alertó del hecho agradeció a las autoridades e hizo un llamado a la ciudadanía para denunciar este tipo de irresponsabilidades.

Desde inicios de año, la AMT incrementó la cantidad de operativos de alcotest en lugares estratégicos de la ciudad, con el fin de disminuir el número de siniestros ocasionados por el consumo de alcohol.

Solo en enero de 2024 se detuvo a 61 conductores por sobrepasar los límites de alcohol establecidos en el Código Integral Penal (COIP).

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