De diferentes sitios estratégicos de la capital, 250 cámaras de videovigilancia fueron reemplazadas. Esto fue debido a un convenio interinstitucional entre el ECU-911 y la empresa de Seguridad del Municipio.

Según las autoridades de control, estos dispositivos permiten que las situaciones de riesgo disminuyan; es así que, en 2022, informaron que se logró prevenir 5.242 alertas y, en este año ya suman 1.855 eventos que fueron riesgosos y se controlaron a tiempo, gracias al monitoreo efectuado con las cámaras.

Estos equipos contarán con tecnología de punta, con un rango de cobertura de 200 metros. En la noche será posible ver lo que suceda alrededor gracias a la luz infrarroja.

“Esto ayudará a reducir los índices delictivos en zonas conflictivas y mejoran la percepción de seguridad en los sectores donde están ubicadas por su efecto altamente disuasivo”, dijo Jaime Bucheli, gerente general de EP Emseguridad.

Además, se conoció que en todo el Distrito Metropolitano existen 706 dispositivos. De las 250 nuevas cámaras, 50 ya fueron instaladas en la fase uno de repotencialización del sistema de seguridad de los barrios beneficiados como Solanda, La Marín, Cotocollao, Carcelén, Mitad del Mundo, Centro Histórico, Túnel de San Diego, entre otros sectores, indicó Bolívar Tello, director general del ECU-911.

Los capitalinos se mostraron contentos ante esta iniciativa, pero solicitaron a las autoridades reaccionar con inmediatez ante lo observado en una emergencia.