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Rosa Torres: Turistas le respondieron al país

Avatar del Rosa Torres Gorostiza

La idiosincracia ecuatoriana se mostró a plenitud en este feriado, para darle un espaldarazo al turismo, que esperaba menos viajeros e ingresos

Aunque el miedo a ser víctima de la criminalidad ha aumentado en la población, y la declaratoria de guerra interna generó pánico colectivo al inicio, los ecuatorianos han mostrado su esencia en este feriado de cuatro días. No dejarán de viajar ni de pasear, ni de salir a comer; lo que sí han hecho, los que han podido, es cambiar de horarios, de destinos, como medida de seguridad para ellos y sus familias.

Los balnearios de la Península de Santa Elena no se quedaron vacíos como se había pronosticado; tampoco los de Manabí y de la provincia del Guayas, pero sí tuvieron menos afluencia de turistas que en años anteriores, porque hay quienes prefirieron ambientes más relajados, menos concurridos, de menor bullicio y más naturaleza.

Sí, la violencia criminal ha cambiado en algo el comportamiento de las familias, en cuanto a la cautela y la desconfianza con la que actúan en los escenarios que se desenvuelven, en las rutas que toman para viajar, y hasta en los gastos que realizan, porque el temor a ser víctimas colaterales de la violencia continúa en sus diarios pensamientos.

Los viajeros se organizaron como pudieron, con los limitados recursos que tenían, para disfrutar de un asueto de cuatro días, sin pensar en el aumento del IVA que seguramente empezará a regir pronto porque la Asamblea dejó la puerta abierta para que eso ocurra pues sus legisladores, divididos como siempre y por sus cálculos políticos, no lograron los votos que permitieran ni aprobar el veto presidencial ni rechazarlo. Así le dejan la culpa al gobierno central, al presidente de la República, que parece más preocupado de su popularización, pensando en la reelección, que en atajar los graves problemas económicos y reactivar la economía. Y lo digo por la decisión de prohibir eventos masivos como si con ello disuadiesen a los grupos terroristas de sus actividades criminales; lo que está atacando es al sector turístico.

El retorno del paseo empieza hoy para volver mañana a la realidad de la escasez de dinero, la falta de empleo, el pago de las deudas. Hoy sabremos qué tanto empuje le dieron los ecuatorianos al turismo y qué tan felices o tristes dejaron a los operadores.