El brote reciente de coronavirus ha incidido en un impacto negativo para muchas compañías importadoras debido a que surge la especulación en precios, altera el mercado y los consumidores finales se ven afectados.

Los proveedores de dichas compañías ubicadas en China, presentan pérdidas millonarias, y mientras más tiempo pasa, el resultado empeora.

Los conductores de camiones y servicio público en China están en cuarentena en su gran mayoría, nadie sale de sus casas, los embarques están detenidos y muchas personas trabajan desde el hogar, sin embargo no se puede hacer mucho.

Esta epidemia alerta a las importadoras, deben tomas soluciones inmediatas, los clientes no esperan.

Se opta por comprar productos de otros países, y a su vez aumentar los precios de los que son originarios en China, caso contrario no obtendrían utilidad. 

Es un grave e inesperado impacto que surge para los comerciantes, además de que se desconoce cuándo todo regresará a la normalidad, y cuándo se podrá seguir cotizando y embarcando.

María Paula Brito