Cartas de lectores: La esperanza de trabajo se ve lejana

Y no hay un horizonte que nos haga ver que en medio de tanta crisis exista un mejor mañana

Ferias de trabajo, páginas que ofertan esperanzas...

 Vidas que se mueven entre papeles y correos electrónicos, una masa laboral que crece sin números para los estadistas.

Cifras que intentan esconder entre los adecuados y no adecuados cuando de empleo se trata.

Pero al final del día, después de tanto caminar y buscar con afán, solo quedan rostros cansados de jóvenes y no tan jóvenes que se mezclan en esa marea de seres humanos que ven pasar los días, que el tiempo se acorta, que las deudas crecen, que parece que no hay luz al final del túnel.

Y no hay un horizonte que nos haga ver que en medio de tanta crisis exista un mejor mañana.

Solo queda el consuelo de llegar a casa y en el mejor de los casos borrar la tristeza y frustración con la sonrisa del ser querido; para otros llegar significa otra noche de tormento, de pensar sin fin, esperando un nuevo amanecer para intentarlo de nuevo.

Manuel Maila López