Cartas de lectores | El Ecuador que Noboa hereda de Noboa

Inicia un nuevo período constitucional con la reelección de Daniel Noboa, lo solo ha ocurrido dos veces desde el retorno a la democracia. Persisten desafíos históricos que no podían resolverse en año y medio de transición. Con cuatro años por delante deben sentarse las bases para solucionarlos o al menos mitigarlos con políticas claras que incluyan a todos los actores en la transformación que el país necesita. La ciudadanía espera mucho, en especial dejar atrás la pesada herencia del correísmo: intromisión en otros poderes del Estado, corrupción, exceso de gasto público y burocracia ineficiente. En lo político, el desafío está en garantizar gobernabilidad. Avanzamos en esa dirección con coordinación entre Ejecutivo y Legislativo, al menos dos años. Hay que revisar leyes, códigos y normas para fortalecer la institucionalidad, facilitar el desarrollo económico y mejorar la calidad de vida. Deben eliminarse las normas que propician la impunidad de actos ilegales. En lo económico los retos se acumulan. La reactivación es más urgente que nunca: reducir gasto público y endeudamiento, disminuir la dependencia del petróleo y diversificar la economía con una agenda de competitividad que amplíe exportaciones y promueva acuerdos comerciales. Es clave garantizar estabilidad energética, abrir el sistema financiero a la banca extranjera, reducir tasas de interés para fomentar el crédito productivo y reformar profundamente la seguridad social. En lo laboral urge reformar el Código para facilitar nuevas contrataciones. También se debe reperfilar la deuda, bajar el riesgo país y mantener relaciones fluidas con organismos multilaterales. Es crucial reducir el déficit fiscal y crear condiciones para atraer inversión extranjera, lo que requiere institucionalidad y seguridad jurídica. Como el Estado carece de recursos suficientes, se requerirá concesionar o vender activos y empresas públicas bajo estándares internacionales que garanticen transparencia. Se debe fortalecer la economía interna impulsando el turismo, agricultura, ganadería y emprendimientos, con políticas coherentes. Hay numerosas tareas pendientes, todas orientadas a lograr estabilidad y crecimiento sostenido para el bienestar de la población. Fortalecer la dolarización es una parte clave. Este esfuerzo debe ir acompañado de mejores indicadores en educación, tecnología, salud, medioambiente y seguridad ciudadana, esta última, esencial para reactivar la economía. Recordemos que Ecuador es de todos.

Jorge Calderón Salazar