Cartas de lectores | Daule espera los estudios del puente

La ciudadanía dauleña viene reclamando la pronta recuperación del puente colapsado en la parroquia Magro

Los dauleños queremos que regrese el puente Gonzalo Icaza Cornejo, y que recupere su identidad. Ese es sueño de los ciudadanos del cantón por ser el puente un evento trascendental en la historia de la vialidad por su servicio de 66 años, entrelazado con Guayaquil, y que colapsó el miércoles 19 de marzo de 2025. Esta obra se inauguró el 25 de julio de 1958 en la presidencia de Camilo Ponce Enríquez. Es importante promover acciones que permitan una mejor circulación vehicular, comercial, turística, y que ayude a reducir el tiempo de recorrido con algunos cantones aledaños, como Nobol. La Prefectura del Guayas ha realizado la investigación pertinente sobre la estructura colapsada en marzo. Además, se tuvo la idea de construir un puente provisional, pero se la ha descartado. La prefecta Aguiñaga manifiesta que, según estudios recientes que se remitieron a la Secretaría de Riesgo sobre el mantenimiento de riesgos preventivos del puente, no hay abandono, sino sobrecarga; y que se ha dialogado con la empresa aseguradora sobre dos pólizas de cobertura. Una de ellas corresponde a las acciones de restitución del puente, y la segunda a indemnización por daños a terceros. ¿Cuándo habrá resultados de la aseguradora? Tienen que responder por los 230 metros de largo y 28 metros de alto del puente.

En medio de este panorama, la ciudadanía dauleña viene reclamando la pronta recuperación del puente colapsado en la parroquia Magro. El lunes 19 de mayo a las 10h00, una delegación de instituciones dauleñas se reunió en sesión de trabajo, en la Prefectura, con el Ing. José Tenelema, delegado de la prefecta, para dialogar y exponer sobre el tema del puente Gonzalo Icaza Cornejo, para que se reconstruya de forma inmediata, con el mismo diseño, por ser símbolo icónico del cantón. La delegación liderada por el ciudadano Giovanny Ronquillo Cuesta cuenta con el apoyo de la Asociación de Cámaras de Comercio del Litoral, del Movimiento Cultural Dauleño y de la Red de Comunidad Magro y Recintos. Los dauleños esperamos respuestas claras y concretas, sin demagogia.

Robespierre Rivas Ronquillo