El liderazgo se puede dar desde cualquier aspecto de la vida y Zozibini Tunzi ha logrado destacarse en varios de ellos. Sus estudios y su mensaje de empoderamiento, por ejemplo. Ella es la recién coronada Miss Universo 2019, un título mundialmente conocido y que la pone, automáticamente, al frente de varias causas justas y con importante voz. Una de ellas su colaboración con la ONU a través de la campaña feminista HeForShe.

El triunfo de la sudafricana es el logro para toda una comunidad, un país y, por qué no, de toda la población negra del mundo.

Ella fue coronada como Miss Sudáfrica el pasado agosto, un concurso que en sus inicios en 1956 solo enviaba participantes blancas al Miss Mundo. En 1977, se creó un apartado llamado Miss Black South Africa y no fue hasta 1992, un año antes que naciera Zozibini, que todas las etnias podían ser parte en este concurso. Es la primera mujer afro de su país en ganar la corona de Universo, anteriormente lo obtuvieron Demi-Leigh Nel-Peters (2017) y Margaret Gardiner (1978).

En la noche de elección del pasado domingo 8 de diciembre, su garbo y figura impactante fueron igual de imponentes que sus mensajes en contra del racismo y el machismo. Zozibini aseguró que para ella es “un honor absoluto” representar como mujer negra y africana a “la inclusión, la diversidad y la representación”.

Sus raíces la fortalecen y enorgullecen. En sus redes sociales, en las que es muy activa, y se ve reflejado el cariño de sus coterráneos. Se comunica en dos lenguajes: inglés, idioma oficial de su país, y xhosa, un idioma bantú hablado por siete millones de personas y que nace de la cultura del mismo nombre. Sus padres han sido su apoyo y fueron protagonistas de su agradecimiento y del momento de su coronación. Lungisa Tunzi, su papá, trabaja en el Departamento de Educación Superior y Capacitación en Pretoria; y su madre, Philiswa Nadapu, es la directora de una escuela. El estudio siempre estuvo por delante en casa, por eso la segunda de tres hermanas se describe como un “ratón de biblioteca”.

Durante este año su vida ha sido un cambio constante. En agosto se mudó de la casa familiar a un lujoso departamento en Tsolo, Easter Cape, como premio por su corona local. Ahora, ella dejará su tierra y vivirá en Nueva York. En un penthouse, con un salario de $ 100.000, ser la imagen de varias marcas de moda y campañas con los mejores fotógrafos. A esto se suma su participación en reuniones de beneficencia y voluntariado, entre ellos la lucha contra el ViH.

Una miss Feminista

Zozi, como gusta que la llamen cariñosamente, es una de las mujeres a seguir de su país en la campaña contra la violencia machista HeforShe que pertenece a la ONU. Su papel ha sido destacado durante el tiempo de su reinado local y lo trasladó hasta el Miss Universo. Allí, en un esfuerzo para dar su mensaje y hacer algo diferente, llevó cartas de hombres africanos sobre el amor a la mujer. Algunas frases se inscribieron en cintas de tela con la que se formó su traje multicolor. Era también un llamado a comprometerse con esta causa que en su localidad refleja cientos de casos de feminicidios al año.

En sus primeros minutos con la prensa también se expresó sobre su postura feminista. “No veo por qué las mujeres no pueden recuperar en 2019 el terreno perdido frente a los hombres. Y tampoco veo por qué las mujeres deban seguir siendo víctimas por violencia de género, especialmente a manos de hombres que, supuestamente, las aman y las cuidan”, opinó.

“Quiero retar a los hombres a que de verdad den un paso al frente y enseñen a sus hijos cómo mirar a las niñas como iguales desde una edad temprana. Así, para cuando crezcan, serán los hombres que la sociedad necesita”, añadió. 

Más personal

- Zozibini Tunzi tiene 26 años (18 de septiembre de 1993).

- Nació en Tsolo, Easter Cape, Sudáfrica.

- Estudió Relaciones Públicas y Manejo de Imagen en la universidad de Cape Town. Se graduó en 2018.

- También tiene talento musical. Ella se considera como una cantante bastante buena a pesar de que no canta públicamente.

-  Sufre de acrofobia (miedo a las alturas) y de tripofobia (miedo a los agujeros muy juntos).