Carlos III quiere contar con la presencia de su hijo Harry el día de su coronación, el 6 de mayo. Ya le hizo llegar la invitación. Ha sido un portavoz de los duques de Sussex que ha hecho pública la noticia, pero ha dejado en el aire si finalmente el príncipe y Meghan Markle asistirán a la ceremonia de rigor en la Abadía de Westminster:

Lo que es una realidad es que en el caso de acudir, Harry no tendrá ningún papel protagonista a diferencia de su hermano Guillermo y su sobrino George, que por deseo del soberano tendrán una función especial. Solo ocupará un lugar de invitado junto al resto de su familia.

La tensión entre los miembros de la familia real británica y los duques de Sussex no ha cesado. De hecho, se ha incrementado en los últimos tiempos a consecuencia del libro 'En la sombra' y las consiguientes entrevistas donde Harry ha destapado las sombras que rodean a la Corona. Él confiesa que hacer públicas sus vivencias ha sido liberador, pero a la vez ha creado una brecha enorme con su padre y su hermano.

Tras la decisión de Carlos III de sacar a Harry y Meghan de Frogmore Cottage, su vivienda oficial durante su estancia en Reino Unido, el soberano ya tendría una solución en el caso de que el matrimonio decida trasladarse a Londres. Se ha planteado cederles uno de los apartamentos que hay disponibles en el Palacio de Buckingham Palace.

El príncipe Andrés será el nuevo inquilino de esa casa de campo situada en Windsor. Pero la mudanza no será inmediata, Harry y Meghan tienen de plazo hasta el próximo verano para sacar sus pertenencias.