Cerca de La Fae en Salinas, a pocos metros del agua, Lisette Prado ejercita a sus alumnas para dominar las olas. No deja de estar pendiente del clima, a través de aplicaciones, por si acaso se avecine la lluvia.

Como muchos emprendimientos, su escuela de surf and stand up paddle empezó en esas encrucijadas entre el azar y las ganas de tener algo propio.

Pero no iba a priori, por más de veinte años, Lisette se ha dedicado al surf de manera profesional y en el camino también aprendió todo lo referente al stand up paddle. Su desempeño ha sido tal que el GAD de Salinas le otorgó un reconocimiento en diciembre de 2023, tras el cúmulo de experiencias en torneos nacionales e internacionales, en los cuales ha sido campeona u obtenido los primeros lugares.

Todo ese conocimiento lo explaya en sus clases para adolescentes y adultos, en donde se generan muchos vínculos no solo de las alumnas, sino también de los padres. Entre todos se van conociendo, ayudando y motivando en una actividad que antes les parecía imposible dominar.

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Emprendiendo en el mar

Desde los 14 años está familiarizada con las olas, no solo para ejercitarse sino también competir, y eso hace que sepa cuándo es el día ideal para meterse al mar. “Dependo mucho de las mareas, las corrientes, los vientos, oleajes… Soy una clima dependiente”. Se ríe.

Chulluype, Punta Carnero, Punta Blanca y La Fae son los lugares donde emprende dando clases teóricas y prácticas de surf o stand up paddle.

Por condiciones, menciona que la temporada playera es la mejor, pese al fenómeno de El Niño. “Después de las lluvias, el ambiente en Salinas se pone mucho más lindo y hay más olas”, explica. Para el nivel de principiantes, son ideales las de medio metro, para los intermedios, las de 1 metro, y los avanzados, de 1 metro para arriba.

Se puede ingresar desde los cuatro años, pero la mayoría de quienes se apuntan son adolescentes en adelante, y 80 % son mujeres. En cuanto a las tablas, si bien ella les facilita, también hay opciones en tiendas especializadas. Sus costos dependen de las marcas, las de surf oscilan entre $ 500 y $ 1.000; y las de paddle entre $ 600 y $ 5.000.

Beneficios en las olas

“Cuando se agarra una buena ola, se disfruta el momento, y esto a su vez trae beneficios”, dice Lisette y añade: “Se desarrolla mucho la motricidad, así como el autocontrol, no solo mientras estás subida en la tabla, sino también en tu día a día”.

El hecho de estar en contacto con el agua, ya sea practicando surf o stand up paddle también aporta a la disminución de estrés, ansiedad y mejora el sistema de la circulación. Sin dejar de lado toda la fuerza física que se gana en brazos y piernas.

La novedad del stand up paddle

Este deporte consiste en remar de pie sobre una tabla de 8 y 12 pies de largo, que produce un importante fortalecimiento físico y puede quemar hasta 1.000 calorías en una hora.

Las clases empezó a dar en manglares de Guayaquil, y ahora se ha centrado en la playa.

Para apuntarse en este deporte “no es necesario saber nadar, suficiente con que sepan flotar, y tengan agilidad; el resto lo aprenden en el camino”, menciona.

La entrega a esta disciplina ha sido tal que sus alumnas ya están compitiendo en los torneos nacionales que se desarrollan en Salinas.

“A mí me escriben para felicitarme por sus logros, pero en realidad la felicitación debe ser para las alumnas que se animaron a hacer una actividad que les parecía imposible”, refiere orgullosa.

Más sobre ella

- Guayaquileña, de 36 años.

- Deportista de alto rendimiento.

- Por seis años consecutivos ha quedado campeona en los torneos nacionales de stand up paddle hasta 2023.

- Campeona latinoamericana en la categoría SUP surf mujeres, 2017.

- Obtuvo el 3° lugar en el Mundial SUP RACE Molokai Oahu en Hawái, en 2017.

- En 2023, el GAD de Salinas le otorgó un reconocimiento por su desempeño deportivo.

- Es la directora de la escuela Surf and Paddle.

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