Los Guardianes están acostumbrándose a vivir en Knowhere, pero sus vidas se verán afectadas por ecos del turbulento pasado que tuvo Rockett (Bradley Cooper). Peter Quill (Chris Pratt), quien sigue intranquilo y bebiendo por la pérdida de Gamora (Zoe Saldaña), debe reunir gente para organizar una dificultosa misión a fin de preservar la existencia de Rockett, gestión que de salir mal supondrá última etapa de los Guardianes.

En el camino estarán Drax, el destructor (Dave Bautista); Nébula (Karen Gillan); Adam Warlock (Will Poulter), un ser artificial; Stakar Ogord (Sylvester Stallone), Devastador de alto rango; y Cosmos, el perro astral.

La ciencia ficción, la aventura, la acción, el suspenso y el buen humor se unen para ofrecer una película divertida, imaginativa, vívida y diferente a sus antecesoras, aunque alguien piense que es “más de lo mismo”.

¿Cuál es la diferencia? Que esta es alucinante, llena de risas, emocionante y con una gran riqueza visual. Es como si un relámpago brillase en las salas de cine.

¿Objetable? Su prolongada extensión (dos horas y media), argumentos excesivos, sangre en demasía, inflada y desigual. Pero ello se debe a los malabarismos del guion.

El controversial James Gunn dirige a estos Guardianes de la Galaxia, volumen 3 con audacia y un continuo accionar que -en realidad- es su marca de fábrica. Le añade “un extraño e inesperado fogonazo de gloria”, asevera la prensa estadounidense y el público lo acepta sin demora. Así como no chista por gestar el filme una rara e inesperada dramatización.

Acierto de la dirección es haberle dado a todos y cada uno de sus personajes igual importancia, tal como lo hace en su enfoque artístico, aunque a veces resulte un largometraje caótico y, justamente, eso es lo que la hace perturbadora, emotiva y bulliciosa.

Presten atención a la banda sonora, que incluye Reason, de Earth, Wind & Fire.

En el campo de las actuaciones no hay mucho que hablar. El cinéfilo que gusta de este género cinematográfico no la ve con ese cristal, sino con la visión que la enmarca: entretener.

Y así terminan estos Guardianes mostrando un adiós que, gracias a Marvel, entusiasmaron al público desde su primera entrega, allá por el 2014.

Y lo hace dejando en claro que la trilogía se refiere a la amistad y al amor, porque ellos arriesgan todo para defender al que, de su grupo, está en desgracia.

Calificación: * * * 1/2

• TAMBIÉN SE ESTRENA

La heredera de la mafia. Kristine (Toni Collette), una estadounidense de tranquila existencia, hereda el imperio de su abuelo con la consigna de continuar con el legado. El anciano era, en secreto, uno de los mayores mafiosos del país y uno muy destacado en el país.

Ante tal responsabilidad, ella abandona su cotidianidad en los suburbios y, guiada por Bianca (Monica Bellucci), la consigliere de confianza de la firma, inicia su nueva vida.

Nadie espera que dé la talla y, más bien, esperan que se rinda pronto. Pero ella lucha contra todo pronóstico para merecer el cargo de nueva jefa del negocio familiar.