Estas cuatro damas permanecen en el recuerdo de quienes las vieron crecer en las décadas de los 80 y parte de los 90. EXPRESIONES le recuerda a algunas de ellas  Empezamos con Pamela Cortés quien al crecer dejó de ser ‘la Paquita ecuatoriana’ y combinó su carrera tanto en el canto como en la actuación. Grabó discos y participó en diversos seriados. Su talento también se ha expresado en el teatro y en innumerables eventos. De este grupo es la que más ha mantenido una carrera estable en el mundo artístico.

CATALINA DE LA CUADRA

Su cara de niña la acompaña hasta hoy. A inicios de la década del 90 se convirtió en un rostro familiar gracias a telenovelas como Dulce tormento, Isabela, Una mujer, la miniserie Los Sangurima y otras producciones en las que compartió escenas con Jaime Araque, María Sol Corral, Silvana y Vilma Sotomayor. Su vida dista mucho del espectáculo, pues es maestra y enseña la palabra de Dios a los niños.

PENÉLOPE LAURET

Todavía era una dulce colegiala del Alemán Humboldt cuando fue fichada por Ecuavisa para ser la adorable protagonista de Por amor propio en 1987. Luego vinieron otras producciones como Los que vendrán. También incursionó en el canto. Hace varios años está volcada a la medicina holística..

JOHANNA NUÑEZ DEL ARCO

En 1987, Telecentro (hoy TC) la seleccionó para integrar el staff de niños del programa Qué chicos, la competencia directa de Laberinto (Ecuavisa). Johanna Núñez del Arco resaltó en el grupo, gracias a su belleza, chispa y ángel. Durante los dos años que duró el espacio se la vio en comerciales y animando eventos. Al crecer estudió producción de televisión y actualmente continúa con su mayor pasión, pero detrás de cámaras.