Aunque en Ecuador las noticias no son muy alentadoras por los niveles de inseguridad que se viven, siempre hay motivos para estar alegres. Basta con apreciar lo que tenemos y no solo quejarnos por lo que nos hace falta. El 1 de agosto se celebrará el Día Mundial de la Alegría. Ellos son personajes del medio nacional y del extranjero que siempre regalan su mejor sonrisa.

La presentadora y concejala Úrsula Strenge considera que “la alegría es la emoción más deseada, tiene una energía luminosa y contagiante, nos mueve a actuar, expresar y compartir. Nos invita a tener sueños, relaciones afectivas más positivas, disminuir el estrés, mejorar nuestra salud y superar las dificultades. Incluso algunos expertos dicen que nos aumenta no solo la calidad, sino el tiempo de vida, por eso es una buena receta conectar más seguido con esta emoción para lograr un estado más estable de felicidad. Martín Lutero decía: ‘Mi risa es mi espada, y mi alegría, mi escudo’”. 

El comunicador Ismael Cala es un hombre de gran personalidad, afable y siempre está sonriente. Cada vez que se escuchan sus mensajes o alguna de sus conferencias, los asistentes se llenan de ese positivismo que transmite. No le importó dejar CNN en Español, donde era uno de los presentadores más destacados para hacer lo que le da felicidad, ser motivador y viajar por el mundo.

Más allá de su elegancia natural y una educación cuidada, a la reina Máxima de Holanda se le atribuye haber aportado un carisma y un dinamismo a la casa real. Aparece siempre sonriente, su alegría contagia y las muestras de cariño hacia su esposo Guillermo y sus hijas (Amalia, Alexia y Arianne) son constantes.

Según Gaby Díaz, presentadora del programa En contacto, “la alegría me ha ayudado a tener una actitud positiva ante la vida, a disfrutar de las cosas buenas que nos rodean y a enfrentar los desafíos que me ha tocado pasar con optimismo”.

El presentador Eduardo Andrade, de BLN, el regreso, siempre tiene una sonrisa para regalar. Comenta que tiene una frase colgada en su habitación que dice: “Siempre hay una razón para ser feliz”. “Yo trato de encontrarla todos los días. Soy agradecido por poder hacer y vivir de lo que amo, agradecido por tener a mi familia, de disfrutar a pesar del trajín constante en el que vivo. Soy agradecido por lo bueno y lo malo y reflexionar para que lo malo no vuelva a suceder”.