En ollas gigantes se coloca el agua con la guayusa que se hierven en fogones a leña. Mientras el agua se calienta, en la cancha de usos múltiples, hombres y mujeres de toda edad comparten sobre sus experiencias y actividades diarias.

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Con esta ceremonia denominada ‘wayusa upina’ empezaron las actividades por los 55 años de vida jurídica del pueblo Kichwa Rukullakta que pertenece al cantón Archidona, en la provincia amazónica de Napo.

La ceremonia es ancestral. En la vida diaria los comuneros amazónicos comienzan con este ritual a las 03:00, siempre lo hacen en la madrugada para estar en mejor comunión con la naturaleza.

La tradición es que toda la familia se levanta y mientras las mujeres preparan la bebida, planifican el trabajo del día, cuentan y descifran los sueños, explica Jacobo Andy, promotor cultural. El ritual no solo se trata de tomar la infusión, sino que representa esa dualidad entre el hombre y la madre tierra.

Manuel Shiguango, miembro de la comunidad, dice que el objetivo de compartir la celebración con los mestizos es mostrar sus costumbres y tradiciones y a la vez rescatar costumbres que poco a poco han ido perdiendo significado.

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“Mucha gente bebe la guayusa, pero no sabe el valor histórico. En las comunidades se trata de mantener esta tradición”, expresa Shiguango.

Durante este ritual hubo danza, también se mostró la habilidad en la pintada del rostro con achiote y las limpiezas chamánicas.