Repensar la presencia viva de la figura paterna en la infancia, los paseos, los planes o el hogar que ya no tienen tacto, pero sí contacto son algunas de las temáticas de la nueva exposición de la artista guayaquileña Charlotte Förster, que se inauguró esta semana en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC).

La muestra, titulada ‘Trazos de lo inasible’, está compuesta por nueve piezas entre instalación, escultura y fotografía en las que ensaya la ‘nostalgia afectiva’. En sus piezas, la muerte agencia los recuerdos como intentos de cercanía por cercar y tomar lo imposible, lo inasible, desde el propio episodio de pérdida. Estas, ha señalado la artista, son también un homenaje a Karl Heinz Förster, su padre.

Förster, estudiante de la Escuela de Artes Visuales en la Universidad de las Artes, saltó a la palestra pública en 2019 cuando obtuvo el primer lugar en la categoría cerámica en la edición octubrina del Festival de Artes al Aire Libre (FAAL).

La muestra estará abierta al público hasta el próximo 31 de marzo.