Triunfante y con lágrimas en los ojos, una combinación que pudimos observar en el rostro de Brendan Fraser tras hacerse acreedor del premio a Mejor Actor en la gala de los Óscars 2023 desarrollado el domingo 12 de marzo. Todo esto gracias a su participación en The Whale.

Tras su gran momento en películas que marcaron la infancia de muchas personas como Al diablo con el diablo, La momia y George de la selva, muchos críticos y prensa que habla de cine, podían afirmar que el actor estaba en la cima de Hollywood. Pero de un momento a otro, todo se derrumbó.

En 2003, Fraser se reunió con Philip Berk, expresidente de la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), en un hotel en Beverly Hills y ambos participaron de un almuerzo. Al final, cuando ambos estaban por retirarse y estrechar sus manos, Berk acosó sexualmente a Fraser. “Su mano izquierda se extendió, agarró mi nalga y uno de sus dedos me tocó y comenzó a moverlo”, dijo Fraser en una entrevista en 2018.

Por supuesto Berk negó rotundamente que tal evento haya sucedido, sin embargo, la HPFA lo vetó totalmente de todos los eventos que tengan que ver con el cine, producciones y eventos a fines. 

En 2007 volvería a pasar un mal rato pues se divorció de su esposa, Afton Smith, con quien tuvo 3 hijos. Uno de ellos con autismo, lo cuál implicó toda la atención por parte de Fraser. En 2016 vuelve a aparecer en TV para anunciar que su madre había fallecido y que, evidentemente, no era un buen momento para el actor.

A pesar de todos estos eventos trágicos en su vida, Fraser luchó y volvió de una manera sorpresiva para todos sus fans, con una prótesis de 130 kilos para alcanzar los 265 que tenía Charlie, el protagonista de The Whale que le entregó a Fraser su regreso de la tormenta silenciosa en la que estuvo encerrado por años. 

Los premios no tuvieron sorpresas o "bofetadas" por parte de actores, pero si una historia emotiva que vale la pena conocer.