Turismo en Guayaquil: la reseña que incomodó y los retos para recuperar la ciudad
La mirada crítica de una reportera extranjera sobre su paso por la urbe porteña expuso los temores que enfrentan visitantes
La periodista brasileña Alinne Fanelli llegó a Guayaquil hace dos semanas para cubrir el partido de eliminatorias entre Ecuador y Brasil en el estadio Monumental. Durante su estancia de varios días, exploró la ciudad desde la mirada de una visitante extranjera en contexto laboral.
Tras el encuentro, publicó un video en redes sociales titulado “Las dificultades de trabajar en Guayaquil”, donde retrató no precisamente la pasión futbolera, sino los obstáculos que enfrentó durante su cobertura.
En el clip, Fanelli mostró imágenes de buses en mal estado y se refirió con preocupación a la inseguridad que percibió. “Según los ecuatorianos, la zona donde se ubica el estadio es muy peligrosa. Nos pidieron que camináramos en grupo, que no nos quedáramos quietos grabando nada afuera y que no lleváramos los celulares en la mano”, relató, en alusión al sector de San Eduardo, en el oeste.
La reseña no es halagadora, pero sí realista. Y sobre todo, deja una advertencia entre líneas: mientras los ojos del continente miraban hacia el estadio, lo que ella mostró afuera fue una ciudad atrapada en el miedo, y que se ha recrudecido en las últimas semanas por el auge de secuestros, extorsiones y asesinatos que ya no sorprenden, pero sí paralizan.
Es una postal que incomoda, que duele y que pone en evidencia la brecha entre la ciudad que se quiere mostrar al mundo y la que se vive en las calles. El turismo, inevitablemente, está en la mira. Expertos del sector coincidieron en que casos como el de Fanelli deberían ser tomados como señales de alerta, no como ofensas.
Turismo en Guayaquil: Es clave dar confianza a los visitantes
Leticia Sánchez es operadora turística y durante varios años también se ha desempeñado como guía en la urbe. Forma parte de la Corporación de Profesionales de Turismo del Litoral.
En su experiencia, ha recibido a turistas que, influenciados por prejuicios y comentarios sobre la violencia en la ciudad, prefieren no bajarse del vehículo durante los recorridos guiados. En estos casos, dijo, es clave ofrecerles confianza para que la experiencia sea positiva.
“Por ejemplo, una vez vino un grupo de mujeres desde Puerto Rico con una idea negativísima de Guayaquil. Pero les transmití confianza, les expliqué cómo iba a ser el recorrido. Una vez que bajamos en el primer punto perdieron el miedo y hasta terminaron haciendo compras en el mercado Artesanal”, dijo.
Frente a los hechos de violencia que sacuden la ciudad, ella señaló que la actividad turística no debe detenerse. “Estas dificultades son desafíos para la innovación, para una renovación en la perspectiva respecto hacia donde vamos a caminar en los próximos años. Debemos seguir aliándonos entre instituciones, hoteles, operadores, proveedores, transporte, porque solo así saldremos adelante”, manifestó Sánchez.
En ese sentido, señaló que el apoyo del Municipio y del Gobierno central, en trabajo mancomunado, puede potenciar varias zonas de la ciudad. Es el caso de La Bahía. Sánchez comentó que, hasta meses antes de la pandemia de covid-19, algunos turistas eran guiados hacia los locales en busca de productos por sus precios.
No obstante, debido a la falta de garantías de seguridad para visitar el sector, desde hace seis años suspendieron esa ruta. Ahora, con los últimos hechos delictivos ocurridos en ese motor comercial del centro de la ciudad, cualquier plan se diluye.
“No existe el contingente de seguridad como hay en otras zonas, en los que hay policía de turismo, en los que hay la confianza para llevar al visitante”, dijo.
Turismo en Guayaquil: Mejorar la prevención de delitos en zonas para visitantes
Luis Albán, docente de Turismo en la Universidad Católica, señaló que a nivel internacional Guayaquil es referenciada como una ciudad insegura. Pero aquello también sucede con otras localidades en la región. Dijo que el problema en la urbe porteña, radica en que no existe control efectivo ni tareas de prevención de delitos en sus pocos polos turísticos.
Explicó que una deficiente coordinación entre las entidades competentes ahondan esta problemática, tal como lo ha venido publicando EXPRESO.
Además, señaló que las propuestas de los gremios para impulsar el turismo en varias zonas de Guayaquil se quedan en papeles. “Las autoridades deben escuchar más al sector. Mire la calle Panamá: está muerta en las noches, no hay turistas”.
Coincidió con Sánchez en que, ante la indiferencia de las autoridades, la unión del sector privado debe ser la vía para fortalecer el turismo en la ciudad.
El especialista y docente Rafael González planteó también capacitar a la ciudadanía en temas turísticos, sobre todo a aquellos dueños de tiendas o de pequeños negocios.
“La gente también debe sumarse y ser un apoyo para cambiarle esa percepción mala con la que viene el turista”, expuso. También sugirió rediseñar los recorridos y zonas de acceso a eventos masivos, con actividades previas y posteriores.
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