Luego de varias semanas en las que los moradores de la Isla Trinitaria constantemente se quejaban por la presencia de insectos en todo el barrio, el Municipio de Guayaquil se hizo presente para iniciar una campaña invernal y evitar así la propagación del mosquito transmisor del dengue.

Los vecinos de la cooperativa Costa de Marfil se encontraban preocupados y temían que el dengue empiece a causar problemas en la zona. “Ya tenemos suficiente con la COVID-19, no queremos casos de dengue aquí. Hay muchos lugares descuidados que se volvieron criaderos de mosquitos”, expresó Damaris Chalá, una moradora del barrio.

“Este sector es uno de los de mayor incidencia y es el mejor para el inicio de este trabajo”, explicó Katherine Olaya, epidemióloga del Ministerio de Salud Pública.

“Con la llegada de las lluvias se alborotaron los mosquitos. En cualquier momento uno de mis pequeños se podía contagiar. Estábamos con mucho miedo de salir”, comentó la mujer, que tiene tres hijos.

Esta campaña será por cuatro meses en diferentes puntos de Guayaquil. Además se entregarán 60.000 toldos.