Una zona de peligro hoy está con una aparente calma. Habitantes de la ciudadela Bellavista Alta, en el norte de Guayaquil, donde semanas atrás un deslizamiento de tierras sepultó un vehículo, lograron una solución provisional para evitar que las desgracias continúen.

Tal como lo ha contado EXPRESO, los deslaves se habían vuelto recurrentes en este punto, lo que había provocado que en varias ocasiones la única calle que conduce a la garita esté cerrada debido a que las piedras llegaban hasta la mitad de la calle del sector.

La mañana de ayer, personal del Municipio colocó decenas de enormes rocas para evitar los deslaves. “Se está haciendo un muro enrocado para que la tierra no ceda y paren los deslizamientos. Esta es una solución provisional”, dijo Martín Fierro, encargado de la obra.

Ángel Morales, administrador de la urbanización, espera que eso no sea lo único que se haga para acabar con el problema. “Ojalá no solo hagan esto como una medida parche y luego dejen botado todo este sector. Necesitamos la repotenciación del alcantarillado y la creación de las escalinatas. Eso es lo que queremos realmente”, manifestó a EXPRESO. Otra de las preocupaciones de los moradores es que el cambio de administración pública deje en el olvido a esta ciudadela que, hace más de 10 años, vienen advirtiendo de la situación.