Otra vista deplorable. Así es como los habitantes de los sectores 100 y 200 de la ciudadela Martha de Roldós, en el norte de la ciudad, describen los tallarines de cables que han invadido todo el barrio.

Moradores como Dannis Delucca señalan que “las empresas de Internet y telefonía siguen atentando contra el ornato del sector”.

Sin embargo, la queja no solo se debe al mal aspecto que da al barrio, sino también al peligro que este ‘cablerío’ representa, expone Francisca Contreras, residente de la zona. “Llevo viviendo aquí diez años, y diez años han estado estos cables que un poco más y tocan el piso”, reclama la vecina.

Y el malestar es mayor por el riesgo que representa para los niños de la zona, pues los adultos temen que los pequeños toquen alguno de los cables por curiosidad y terminen electrocutados.

Oswaldo Ocaña, residente de la Martha de Roldós, pero del sector 700, señala que esta situación se repite en toda la Martha. "Yo hablo por mi manzana, pero usted se da una vuelta y ve que los cables llegan hasta el piso en toda la Martha, y los tallarines están en casi toda la ciudadela", reclama el ciudadano indignado ante esta situación.