Frente al emblemático Buque Escuela Guayas, atracado al pie del río del mismo nombre, estaban formados los primeros 107 estudiantes de la Escuela Superior Naval Comandante Rafael Morán Valverde (ESSUNA) la tarde de este 2 de abril, quienes iniciaron el Crucero Internacional de Instrucción Mar Báltico 2024.

Ellos se encontraban firmes, mientras que la seriedad marcaba su rostro. Su vestimenta (camiseta azul con pantalón blanco y medias y zapatos a juego con este último) era un distintivo de lo que harían: surcar los mares siendo “embajadores itinerantes” del Ecuador, según las autoridades.

La salida desde la ciudad de Guayaquil empezó con una ceremonia que estuvo prevista para las 11:30, pero que arrancó a las 12:00, con la llegada del ministro de Defensa, Giancarlo Loffredo, junto con el gobernador de la provincia del Guayas, Vicente Auad.

Antes de la entrada del alto funcionario, autoridades de las Fuerzas Armadas también ingresaron con honores, entre ellos el contraalmirante Pablo Caicedo Salvador, jefe del Estado Mayor de la Armada; así como Edwin Adatty Albuja, comandante general de la Fuerza Terrestre; y Mauricio Salazar Machuca, comandante general de la Fuerza Aérea Ecuatoriana Accidental.

Inmediatamente después, el oficial que estaría a cargo de toda la navegación del Buque Escuela dedicó unas palabras a todos los presentes. Estos lo escuchaban atentos a diferentes distancias. Los familiares de los 47 oficiales de la Armada que también salieron, se encontraban sentados y cubiertos del sol en una carpa. Mientras que los allegados de los estudiantes permanecían al filo del malecón y cubriéndose con paraguas, sus manos o simplemente aguantando los rayos.

Este viaje, según información brindada por el departamento de Comunicación de la Armada, constaría de dos partes. Los estudiantes de cuarto año, de la promoción Corsarios 2024, navegarían hasta la ciudad de Kiel, en Alemania, hasta mediados de agosto. Allí desembarcarían y regresarían por vía aérea a Ecuador. Mientras tanto, los estudiantes de tercero, simultáneamente al desembarque, abordarán un avión hasta la misma localidad europea para culminar el crucero y regresar al país en el Buque.

En todo el trayecto, ellos portarán el eslogan ‘Ecuador, the origin of cacao’ (que traducido al español sería ‘Ecuador, el origen del cacao’) y serán los encargados de dar a conocer la cultura el país, según el ministro de Defensa.

Poco después de las 13:15 la ceremonia culminó y los cadetes fueron advertidos de que tendrían unos minutos para terminar de despedirse de sus familias. Rápidamente, oficiales y estudiantes se acercaron para decir adiós.

Las lágrimas en los rostros de los familiares de los tripulantes rodaron desde ese momento hasta las 13:37, hora en la que la embarcación zarpó desde el muelle del Yacht Club Naval, en el malecón Simón Bolívar, para empezar su travesía a lo largo de la costa de 23 países de América y Europa.

Loffredo, poco después del zarpe, dijo que esta sería una experiencia “invalorable” y muy importante para oficiales y tripulantes. “Sin duda alguna fortalece las capacidades del entrenamiento y esta vez, en el zarpe 34, el Buque Escuela Guayas va llevando a 23 puertos alrededor del mundo un mensaje de hermandad desde Ecuador para el resto de los pueblos”, afirmó.

Todos, autoridades y familiares, le hicieron de la mano (el gesto de despedida) al Buque hasta cuando este ya no podía ser visto. “Estoy completamente orgullosa de mi hijo. Espero que le vaya excelente en todo y pueda regresar con bien”, dijo Lady Sisalima, quien llegó desde Loja para despedirse de su hijo. 

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