Guayaquil amanece este 21 de abril en medio de lluvia y un proceso electoral que ha caotizado la capacidad vehicular de las vías, dejando varios sectores con un fuerte congestionamiento, como es el caso del sector aledaño a la Universidad de Guayaquil.

De acuerdo al alcalde de la ciudad, Aquiles Álvarez, se ha desplegado un total de 1008 agentes para dar control en las vías, sin embargo esto no se observa en su totalidad.

La lluvia, sumado al descontrol de los automóviles ha generado que la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) incluso cierre parte de la calzada para quienes buscan llegar a sus recintos electorales en carro. Como ha sido el caso del ingreso de vehículos a la Universidad Católica Santiago de Guayaquil, que ahora permanece solo se permite el ingreso peatonal.

A decir de la ciudadanía, ha faltado planificación de las autoridades de tránsito para esta clase de casos, donde dos situaciones distintas chocan, generando este caos.

“En medio de lluvias la gente va más despacio, y durante un proceso electoral todos quieren salir, por lo que se vuelve un caos. Ahora votar en medio de la lluvia, eso es peor, la gente se toma más tiempo, las calles están empapadas y a veces no hay donde parquearse, sea porque no hay espacio o porque donde quiero ponerme hay charcos enormes de agua”, comenta Mauricio Echeverria.

Mientras que Darwin Manzano considera que las vías han quedado sin suficientes agentes desplegados. “En los recintos de la avenida de las Américas vi máximo dos agentes en ambos lados de la vía. Luego veo otro por la 9 de Octubre, pero le pasaban a lado gente parada en los baldes de una camioneta y no decía nada ¿Qué pasa? ¿Solo los colocaron de adorno?”, reclama.

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