Luego de que EXPRESO publicó un artículo sobre el desalentador panorama en que se encuentran diferentes árboles debido a la cochinilla, Adrián Zambrano, director de Ambiente y Preservación de Áreas Verdes del Municipio, respondió que tiene identificados los sectores y árboles más afectados por esta plaga, lo que le permite realizar un “monitoreo constante y un tratamiento”.

Aseguró que se están llevando a cabo mesas de acción junto a carteras del Estado como el Ministerio de Ambiente y el de Agricultura, agencias como Agrocalidad y miembros de la sociedad civil para “compartir estrategias y experiencias en el combate de estas plagas”.

¿Pero cuántos árboles han muerto debido a las plagas? Zambrano aseguró que, de acuerdo a registros, son 322 árboles muertos que corresponden a especies de Samanes, Ficus, Acacia, Cítricos entre otras.

Sin embargo, en el último censo del arbolado urbano se identificaron 19.000 árboles afectados por plagas entre leve, medio y grave. Esto compromete aproximadamente al 20 % del arbolado urbano actual, reveló.

Acotó que dentro del plan de reforestación municipal, en la parte urbana han sido sembrados 18.000 árboles desde el 2021 hasta la actualidad.

“Nuestro plan contempla que la reforestación sea en época de siembra adecuada de árboles que hayan demostrado resistencia a las plagas que actualmente afectan a las áreas verdes de la ciudad, sumado a esto también se busca diversificar el inventario de especies con el que cuentan los parques, parterres y demás áreas de la ciudad para evitar que se repita un escenario como el que estamos experimentando actualmente con los árboles de Samán”, puntualizó el funcionario. 

Otra interrogante contestada fue la de cómo salvar a los árboles que aún tienen esperanzas de vida. El funcionario precisó que la primera parte del plan involucra una evaluación de los árboles por parte del equipo técnico de Ambiente y Preservación de Áreas Verdes, la cual permitirá establecer "si el árbol puede ser recuperado o no". "Una vez definido esto se ha elaborado una estrategia que cuenta con varios ejes en los que se incluyen: Podas de ramas afectadas, fumigaciones con insecticidas específicos y amigables para el medio ambiente y fertilización para volver a estos árboles más resistentes a las plagas y permitirles recuperar su bienestar".