El mal olor se percibe desde que se ingresa a la Martha de Roldós. Un equipo de Diario EXPRESO espera a los líderes comunitarios de esta ciudadela y no se resiste la pestilencia. El fotógrafo busca las aguas desbordadas y no son visibles. Han pasado solo cinco minutos hasta que llegaron los vecinos y se comprende la urgencia que ellos tienen para que se solucione el problema.

“Estamos hartos de los daños de las alcantarillas en el vecindario. Son frecuentes. Llevo un año llamando para que vengan a arreglar. Vienen pero solo hacen trabajos de parche, porque al mes se vuelven a dañar”, señala Elsa Martínez, ama de casa que lleva 35 años viviendo en ese sector.

Unas semanas atrás se mezclaron el agua potable y las servidas porque se rompió una tubería, cuenta Jessenia Hernández, líder comunitaria de las manzanas incluidas en la 500 de la ciudadela, donde en época invernal se inundan.

El problema ya colmó la paciencia de los moradores y por eso el lunes de esta semana se reunieron los nueve líderes comunitarios que hay en el sector y decidieron escribir una carta a Interagua, que entregaron el martes 16 de noviembre, según los moradores. Allí solicitan el cambio total del sistema de alcantarillado de toda la ciudadela, explica Haydée Tomalá, líder comunitaria de las manzanas que forman parte de la 700 de la zona. Luego de recorrer el sector en compañía de los vecinos, el equipo periodístico comprueba que en todas se repite el mismo escenario: los canales que deben servir para evacuar el agua de lluvia, están llenos de aguas servidas y hasta de basura.

La parte más crítica está desde la manzana 706 hasta la 708, sector donde se forma una cascada de agua servida. “Uno no puede comer ni dormir por estos malos olores”, lamenta Teresa Sánchez, residente del lugar.

Los líderes comunitarios resaltan que ellos ya han ido al Municipio de Guayaquil, para pedir también la regeneración de toda la ciudadela, y allí les han informado que eso ya está aprobado, aunque no les han indicado la fecha exacta en la que empezarán estos trabajos.

Pero como lo dan por hecho, antes de que se inicien esos trabajos solicitan que también se cambie todo el sistema de alcantarillado. Así no tendrían que volver a romper las vías y peatonales una vez que se termine con la regeneración.

“Lo que queremos es un trabajo integral, porque urge que las autoridades del Municipio de Guayaquil caminen por toda la Martha de Roldós y se den cuenta de las tapas que están dañadas y que son un riesgo, porque ahí se puede caer un vecino”, indica Carlos Díaz, morador del sector.

Agrega que entre las manzanas 505 y 507 hay una tapa que está floja. “Si un vecino pisa esa tapa se puede caer en el pozo, que es profundo. No queremos lamentar este tipo de accidentes”, recalca Díaz.

Sobre todas estas quejas de los vecinos de la ciudadela Martha de Roldós, Diario EXPRESO envió preguntas al departamento de Comunicación de Interagua, al correo de Ilfn Florsheim Tamayo, directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la entidad. Se le consultó para cuándo hay planes de cambiar el alcantarillado en ese sector y por qué no se hizo la obra antes, si los habitantes dicen que están solicitando una solución desde hace más de un año. Pero hasta el cierre de esta edición no llegaron las respuestas.

Los vecinos hacen hincapié en que no es posible tener este foco de infecciones en las calles, porque además del peligro que representa estar expuestos a aguas servidas, temen que estén contaminadas con fluidos o heces de personas infectadas con coronavirus. Por lo tanto exigen que las autoridades actúen con celeridad.