En la calle Primero de Mayo, entre Tulcán y Carchi, centro de Guayaquil, una alcantarilla sin tapa molesta a los transeúntes que a diario caminan por el sitio.

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Ante la inacción municipal, ciudadanos han colocado tablas y palos en los huecos para evitar accidentes y personas heridas.

Pero en otras zonas de la urbe porteña también se registran alcantarillas sin tapa, lo que representa un peligro para los peatones.

En la intersección de la avenida Carlos Julio Arosemena y Las Monjas, en el centro, hay dos alcantarillas sin ningún tipo de recubrimiento, desde hace más de cinco meses.

Ciudadanos piden a los funcionarios municipales que subsanen este tipo de problemas que los aqueja a diario.

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