Una de las fortalezas del ecuatoriano Richard Carapaz está en la alta montaña, y si bien tuvo escaramuzas de ataque en la etapa de ayer, al parecer ha decidido guardarse para las dos jornadas de escalada que se le vienen esta semana, la decisiva del Tour de Francia, tras el segundo y último descanso que será mañana.

Es en este contexto que el ciclista tricolor de Ineos dio un paso más en sus aspiraciones de llegar al podio de la prueba luego de que recuperó el cuarto lugar de la clasificación general, que sigue comandada por el esloveno Tadej Pogacar con su maillot amarillo, mientras que Rigoberto Urán recuperó la segunda plaza y el danés Vingegaard la tercera.

El francés Guillaume Martin fue desalojado de la segunda plaza de la general, aparece Richie cuarto a 5.33 del puntero y Enric Mas octavo a 7.11. Pello Bilbao, enfadado porque no irá a los Juegos Olímpicos de Tokio, recuperó la décima plaza a 10.59 de Pogacar.

En la reciente etapa, en la que Carapaz cruzó la meta en el puesto 23, el ganador fue el estadounidense Sepp Kuss (Jumbo Visma), quien se volvió loco de alegría en la recta de meta en Andorra la Vella. Tiró las gafas al público, levantó los brazos y firmó una gran victoria, por delante de Alejandro Valverde, quien quedó segundo y con la miel en los labios.

Una victoria en solitario, bien luchada por el ciclista de Durango (Colorado), de 26 años, quien atacó en Beixalis, soltó a Valverde y se presentó en meta con tiempo de sobra para degustar la gloria como ganador de la decimoquinta etapa que unió Céret y Andorra la Vella, de 191.3 kilómetros.

Kuss, ganador de etapa en la Vuelta, residente en Andorra y gregario de confianza de Roglic en el Jumbo Visma, paró el reloj 23 segundos antes que Valverde, un segundo lugar con anécdota, pues nunca un corredor de 41 años o más se había clasificado segundo en una etapa.

“Sentí la presión de Valverde, un ciclista veterano, de gran experiencia. Lo di todo, pero sufrí mucho con el viento en contra”, dijo Kuss, animado por su novia en la subida a Beixalis y por su padre desde su casa en Andorra a través de le tele.

De vuelta al pelotón que pelea en la general, ninguno logró el objetivo de poner en aprietos a Pogacar, quien salió a sofocar todos los intentos de rebelión. No hubo manera. Ni Valverde logró atrapar a Kuss ni los hombres del podio pusieron al esloveno contra las cuerdas. Todos a la jornada de descanso. La vida en el Tour sigue igual.

Mañana el certamen tendrá su segundo receso antes de afrontar la última semana. El pelotón volverá a la actividad el martes 13 de julio con la decimosexta etapa entre Pas de la Casa y Saint-Gaudens, de 169 kilómetros y con Carapaz intentando escalar posiciones.