"La Copa Libertadores es nuestra obsesión", así como reza el eslogan del torneo, los hinchas azules cantaban en los exteriores del hotel Ouro Minas donde los azules se hospedaban a algunos pisos de allí. Para ellos no importa que Atlético Mineiro cueste 100 millones de dólares más, ellos confían en la gesta copera.

Y es que los fanáticos azules han dejado todo para estar junto a su equipo en el estadio Mineirao y ser testigo de una posible clasificación a cuartos de final de la Copa Libertadores. Han sido ocho días de viaje por vía terrestre en los que salieron de Guayaquil y pasaron por Tumbes, Lima, Arequipa, Desaguadero (estas de Perú), La Paz, Santa Cruz, Puerto Quijarro (estas de Bolivia), Corumbá, Campo Grande, Sao Paulo y Belo Horizonte.

"El viernes 24 salimos con los muchachos para acá. Hemos pasado por varias ciudades, desde Lima, Bolivia y Brasil. Para venir hemos vendido pulseras, chicles, chupetes a fuera del Capwell, cuidando parqueos, comiendo atunes, cosas que nos e dañen porque no podemos faltar y vamos a volver con la clasificación", dijo Paquito de gira, como lo conocen en la barra azul a este hincha que ha recorrido toda Sudamérica viendo al Bombillo.

Pero Paquito no era el único azul en los exteriores del hotel. Eran más de 15 aficionados de Emelec que aprovechaban para desayunar con lo que habían recaudado a su llegada. "Los jugadores nos dejaron algo acá en el lobby para que podamos comprarnos algo de desayuno, también les hemos pedido que nos ayuden con entradas. Estamos motivados", dijo Jorge.

Todos están con ánimos, a pesar del largo viaje que han tenido desde Ecuador. "Hermano es que nosotros tenemos esa fe de que Emelec lo va a ganar, para mí termina 0-3 y clasificamos con autoridad", dijo un hincha azul de la barra que prefirió no dar su nombre.

Con este pálpito, EXPRESO entró en la dinámica de preguntarle a los aficionados azules cuál es su marcador. "3-0 ñaño, como al pavo", decía uno por ahí. "2-1 les vamos a ganar, con gol de Rodríguez que anda fino", decía otro. Pero ninguno pensó en los penales.

El optimismo hacia los azules es innegociable y hoy estarán alentando desde el Mineirao en busca del batacazo.