Moisés Caicedo brilló en el mediocampo de Chelsea en la victoria por 2-0 sobre Tottenham en el derbi de Londres del jueves 2 de mayo, un resultado que mantiene vivas las aspiraciones de los Blues de clasificar a torneos europeos la próxima temporada.

El Niño Moi cumplió a la perfección las instrucciones del técnico Mauricio Pochettino, actuando como un depredador en el medio sector. Esta tarea le fue encomendada al ser el único volante con cualidades más defensivas que el inglés Conor Gallagher, su pareja en Stamford Bridge.

Dos cabezazos, uno de Trevor Chalobah y otro del senegalés Nicolas Jackson, dieron la victoria al conjunto de Pochettino, que se sitúa así a tres puntos del sexto lugar del Manchester United, con cuatro partidos por disputar.

Chelsea ha llegado en mejor forma al tramo decisivo de un torneo lleno altibajos y cuestionamientos. Los malos resultados de los últimos compromisos habían puesto en duda el despegue del equipo de Pochettino, algo que ha coincidido con la explosión y el liderazgo asumido por Cole Palmer. 

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