Liga de Quito: esta es la anatomía táctica de los albos
Opinión | Los fundamentos defensivos de los albos son: colocación, acciones y desplazamientos de jugadores al perder el balón
Dime cómo atacas y te diré cómo defiendes. Y es que el fútbol no se entiende de manera troceada. Tener tres líneas (4-3-3, 4-4-2) ofrece equilibrio y ocupación racional del espacio, de ahí que un sistema con más de tres nos daría mala ocupación de amplitud, y una exagerada ocupación de profundidad. La amplitud y profundidad deben estar equilibrados.
Los fundamentos básicos ofensivos que convierten a Liga de Quito en una apisonadora radican en ofrecer apoyos al poseedor del balón, por compañeros que están en la orientación del juego. No jugar el balón en el mismo carril del que procede cuando se han dado 4 o 5 toques por la misma zona.
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Lo ideal es jugar al espacio; cualquier pase al pie permitirá al rival la anticipación, siempre y cuando los delanteros estén fijados.
No sería lógico en un jugador de banda desplazarse en forma horizontal a más de 10 metros de su orilla. En este caso estaría invadiendo zona del compañero interior y facilitando que un solo adversario pueda controlar a ambos con un pequeño desplazamiento.
Transición de Liga en defensa
Los fundamentos básicos defensivos de los albos son: colocación, acciones y desplazamientos de los jugadores al perder el balón.
Transición defensiva: si Liga de Quito opta por el juego corto, la forma de asegurar la posesión es realizando pases de corta distancia y poca dificultad. Es decir, toques entre 10 a 15 metros. Eso sin contar que tiene en Leonel Quiñonez y José Quintero, lanzamientos aéreos de entre 30 y 40 metros con mucha precisión.
Su modelo de juego es solo una parte del camino, ya que importa el conocimiento que tenga del rival.
Piovi aclara el partido cuando el desorden lo oscurece. Busca un posicionamiento que impida al adversario verlo a él y al balón al mismo tiempo. Arce dinamita el cotejo en la zona más complicada del campo.
Liga de Quito juega a dos toques; el concepto engloba el pase (incluido el centro), el regate y el tiro; la conducción y el control. Todo lo que supere estos dos toques tácticos implica más tiempo a favor del adversario.
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