Es voz autorizada para analizar la realidad del tenis actual. Su puesto en la cima del ranking mundial le da a la polaca Iga Swiatek derecho de sobra para considerar ya sea una celebración o una queja. Esta vez, previo al debut de hoy en el Open de Madrid, fue la segunda.

La nacida en Wroclaw, Polonia, está consciente que su deporte a nivel femenino ha dado grandes pasos, pero recalca que aún hay trabajo por hacer, así como manifestó que prefiere las condiciones de Roland Garros o Stuttgart a las de Madrid, este último donde aspira a ganar por primera vez en su carrera.

Swiatek vuelve al WTA 1000 de Madrid, donde solo jugó en 2021. Y es que el Mutua Madrid Open es el único gran evento de tierra que no está en su historial. Arrancará hoy, ante la austríaca Julia Grabher, repescada de la fase previa por la retirada de la rumana Emma Raducanu, quien venció a la búlgara Viktoriya Tonova por 6-1 y 7-6(5).

Swiatek viene de ganar en Stuttgart el domingo pasado. Es el segundo título del 2023 en sus vitrinas tras el de Doha. “Si bien el tenis es uno de los deportes donde mayor igualdad hay entre hombres y mujeres, aún hay mucho trabajo por hacer en términos de premios”, indicó Swiatek, quien recibió un premio económico menor que Carlos Alcaraz la semana pasada, cuando ganaron torneos de igual categoría. La polaca venció en Stuttgart y el español en Barcelona.

La número uno del mundo reconoce que Madrid es un torneo que se le resiste. “Nunca he podido dar el cien por ciento. Quiero vivir la experiencia. Ganar queda mucho, está lejos, seis partidos. Estoy solo centrada en la primera ronda y luego ya veremos”, indicó.