El domingo 7 de marzo, en el estadio Chucho Benítez, se jugará un duelo que estará cargado de morbo y emotividad. Así es como además de la importancia de los tres puntos en juego, se recordará el paso de algunos futbolistas ocurrido en determinado equipo.

Es que entre Guayaquil City y Barcelona habrán seis jugadores con opciones de ingresar al campo con pasado en el conjunto adversario, además de uno que lo mirará desde fuera porque aún no logra sus papeles de nacionalizado.

Es así como el Guayaquil City tiene a varios elementos que militaron en Barcelona. Son cinco jugadores que vistieron la casaquilla amarilla, por lo que si el entrenador Pool Gavilánez lo desea, casi la mitad de su alineación podría ser con otroras futbolistas canarios. Uno de ellos es Máximo Banguera, ganador de dos títulos nacionales y figura en el Ídolo hasta el 2019, pero que ahora viste de celeste. El guardameta es hasta socio de Barcelona y no ha escondido su anhelo de volver a la tienda amarilla, ya sea como jugador o directivo.

A él se suman Byran Rivera, quien tuvo pocos minutos en el cuadro amarillo en el 2020, además Flavio Caicedo que jugó dos temporadas en el conjunto canario, donde alternó en la titularidad. Está también Marcos Caicedo, quien estuvo en el cuadro amarillo varias temporadas, pero donde su rendimiento fue de más a menos al punto que el año anterior fichó por Liga de Quito, donde tampoco tuvo un nivel superlativo. Lo de hoy tendrá aires de revancha para el Hijo del Viento.

También está en el Equipo de la Ciudad, Ángelo Quiñónez, cuyo pase pertenece a Barcelona e hizo las formativas con los canarios, pero se fue a ganar minutos al Deportivo Cuenca en 2020. Ahora con el City busca afianzarse.

Pero, no solo en el cuadro ciudadano habrá futbolistas con algo de nostalgia por su pasado, también el Ídolo. Uno de ellos es Gonzalo Mastriani, delantero que usa generalmente el técnico Fabián Bustos para la variante y Michael Hoyos, que por el tema de su nacionalización aún no puede actuar.

En el caso de los ex City que están ahora en el Ídolo, fue su buen nivel con los celestes lo que les abrió las puertas en el campeón ecuatoriano.