Edgardo Bauza volvió a casa: emotivo reencuentro con Liga de Quito y la Libertadores
El Patón Bauza volvió al estadio Rodrigo Paz y se reencontró con el trofeo que cambió su vida y la historia de Liga de Quito
Edgardo Bauza, el técnico argentino que cambió la historia de Liga de Quito, vivió un emotivo reencuentro con el estadio Rodrigo Paz Delgado, el mismo escenario donde escribió páginas doradas junto al club albo, incluida la conquista de la Copa Libertadores en 2008.
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El Patón, quien actualmente enfrenta una enfermedad degenerativa, ya había vuelto al estadio a inicios de 2025 durante la Noche Blanca, cuando fue homenajeado por la institución. En aquella ocasión, acompañado de su esposa Maritza Gallardo, recibió el cariño de miles de hinchas y exjugadores que aún lo recuerdan como el estratega que llevó a Liga a lo más alto del continente.
Esta nueva visita, más íntima y cargada de simbolismo, se dio el miércoles 10 de junio. Sin público ni actos protocolares, Bauza regresó al banquillo donde forjó un equipo de leyenda, y pudo reencontrarse con el trofeo de la Copa Libertadores, esa que lo inmortalizó como uno de los más grandes técnicos en la historia del fútbol sudamericano.
Hoy fue un día demasiado especial ! @LDU_Oficial pic.twitter.com/RDW7KVvSF6
— CyberalbaOficial (@cyberalba2) June 11, 2025
Un video compartido por su esposa en redes sociales captó la emoción del momento. Conmovida, Maritza Gallardo escribió: “Hoy fue un día demasiado lindo”, frase que resume lo vivido en esa jornada donde el pasado glorioso y la gratitud se citaron.
El legado eterno del Patón Bauza
Bauza no solo dejó títulos en Liga de Quito, dejó una identidad. En su primera etapa, consiguió el campeonato nacional de 2007 y lideró, al año siguiente, una histórica campaña internacional que culminó con Liga de Quito alzando la Copa Libertadores, el mayor logro de un club ecuatoriano hasta la fecha.
En 2009 volvió al banquillo albo y siguió sumando gloria: ganó una nueva corona nacional y la Recopa Sudamericana en 2010. Su influencia trascendió los resultados. Implantó una mentalidad ganadora, forjó líderes dentro del campo y construyó un vínculo irrompible con la hinchada.
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