La presión aumenta y llega por todos lados. Si hace dos días el pedido era de los deportistas clasificados y campeones olímpicos, ayer se sumaron dos de las Federaciones Internacionales por deporte más poderosas del mundo: la Federación de Atletismo de Estados Unidos y la Federación Francesa de Natación, con una sola consigna: “aplazar los Juegos de Tokio 2020”.

En una carta abierta publicada en Twitter, el director ejecutivo de la USA Track and Field, Max Siegel, manifestó que “avanzar a la luz de la situación global actual no sería lo mejor para nuestros atletas”. La misiva también fue dirigida a la directora ejecutiva del Comité Olímpico y Paralímpico de los Estados Unidos (USOPC), Sarah Hirshland.

“Desafortunadamente, mientras nuestros atletas de clase mundial están dispuestos a esforzarse al máximo para alcanzar el éxito olímpico, la probabilidad de que puedan entrenar adecuadamente en un ambiente seguro y adecuado, y replicar la excelencia que todos esperamos, no parece probable en medio de esta crisis global”, escribe Siegel.

Por su parte, la Federación Francesa de Natación, a través de su presidente, Gilles Sezionale, se sumó al pedido y expresó “su profundo desacuerdo” con el presidente del Comité Olímpico francés, Denis Masseglia, “por mantener una posición firme en cuanto a la celebración de los Juegos Olímpicos sin siquiera tener la decencia de querer evocar la opción del aplazamiento”.

“En lugar de mantener esta línea sin sentido frente a la crisis de salud mundial, estaría orgulloso de que el Comité Olímpico francés transmitiera al Comité Olímpico Internacional (COI) las preocupaciones de sus federaciones, y las dudas legítimas sobre la equidad deportiva”, explicó Sezionale. 

Todo esto, a juicio del presidente de la natación francesa, "exige que el COI estudie oficialmente un posible aplazamiento de los JJOO".

Los organismos sustentan su tesis en que los deportistas están bajo un tremendo estrés, presión y ansiedad.