La Supercopa Ecuador se postergó. Se la jugará durante la paralización de la LigaPro debido a la Copa América. Y es la única salida viable, aunque no hay fecha definida para el torneo de selecciones, porque también depende del desarrollo de la pandemia.

¿La razón? Un nuevo problema surgió para este cuadrangular organizado por la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), a un poco más de 24 horas para el pitazo inicial. Uno de los clubes participantes informó que tiene más de cinco positivos a COVID-19.

Aunque la FEF no dio el nombre del equipo, se conoció que Emelec tiene nueve contagiados. Todo empezó en la Explosión Azul, ante Técnico Universitario de Ambato, el pasado 29 de enero.

El cuadro eléctrico mantuvo la información en reserva. Se limitó a emitir un comunicado señalando que se acoge a la suspensión del torneo para salvaguardar la salud de sus integrantes.

Pero, el médico del Rodillo, Álex Vasco, aceptó que uno de sus jugadores fue aislado porque presentó los síntomas de la enfermedad. Y apuntó al fin de semana del partido como la fecha para el posible contagio.

Más allá de los nombres, la única certeza en la tarde de ayer fue que el torneo pasó para el segundo semestre del año.

“Para precautelar la salud y bienestar de todos los componentes del fútbol, la Federación Ecuatoriana de Fútbol informa que se posterga la realización de la Supercopa 2021”, inició el comunicado de la FEF.

Y explicó la parte reglamentaria para esa decisión coherente. “El reglamento del manual operativo de competiciones de la FEF, aprobado por el COE Nacional, establece que en caso de presentarse más de cinco casos positivos de COVID-19 por equipo, se debe reprogramar el partido”.

Pero, aplazada una semifinal, se descuadra toda la programación, así que lo mejor fue reprogramarla.

Este obstáculo fue un golpe definitivo para la organización, que desde el inicio tuvo que lidiar con problemas.

La Supercopa Ecuador fue creada para enfrentar a los campeones de LigaPro y Copa Ecuador. Pero, el segundo torneo no se desarrolló en 2020 por culpa de la pandemia.

La FEF apostó por organizar un cuadrangular invitacional incluyendo a Barcelona, Emelec, Independiente del Valle y Liga de Quito.

Sin embargo, la directiva de Barcelona declinó al considerarlo un evento amistoso. Los derechos de transmisión de sus juegos comprobatorios de pretemporada fueron vendidos a GolTV y el cuadrangular iba a transmitirse por Directv y El Canal del Fútbol.

Además, no quedó claro el sistema de clasificación de los equipos al cuadrangular. Santiago Cattani, presidente de Universidad Católica, lo calificó como un evento amistoso al que le pusieron el nombre de Supercopa.

El presidente de la Ecuafútbol, Francisco Egas, insistió en que esta Supercopa era oficial, pero Barcelona mantuvo su posición, se fue de pretemporada a Manta y 9 de Octubre fue invitado como su reemplazo.