Álvaro Morata, delantero del Atlético de Madrid, se reintegró este jueves 1 de febrero a los entrenamientos con el grupo, ya recuperado de un golpe en el muslo y listo para el derbi de este domingo 4 de febrero contra el Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu, según demostró en la sesión matutina tras el triunfo por 2-1 frente al Rayo.

No jugó ni fue convocado el atacante madrileño a ese choque, disputado en el estadio Cívitas Metropolitano, a causa de un rodillazo sufrido el pasado domingo contra el Valencia, ni tampoco se había entrenado ni el lunes ni el martes, con trabajo en el gimnasio, hasta este jueves, cuando ya saltó al césped para ejercitarse con normalidad e intensidad.

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Simeone ya puede contar con él para el derbi, en el que tiene las tres bajas de Thomas Lemar, fuera de los últimos 28 encuentros de su equipo por la rotura del Tendón de Aquiles derecho sufrida el pasado 16 de septiembre; César Azpilicueta, ausente las últimas dos semanas por la rotura del menisco; y José María Giménez, lesionado muscularmente ante el Valencia. El uruguayo no jugó ante el Rayo ni lo hará este domingo ante el Real Madrid.

El resto del equipo estará a disposición del técnico argentino, incluido Gabriel Paulista, fichado el miércoles al Valencia, directo a la convocatoria frente al Rayo, aunque no disputó ningún minuto, y ya en la competencia por un puesto de titular en el centro de la defensa del Atlético, con el que ha firmado un contrato hasta el final de la temporada.

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