El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, respondió de manera contundente a la solicitud del Comité Olímpico Ecuatoriano para que la ciudad sea sede de los Juegos Bolivarianos 2029 luego de que el comité organizador haya solicitado posponer la sede.

La resolución fue tomada por los miembros del Comité Organizador de los Juegos Bolivarianos 2025, a pesar del compromiso verbal del ministro de Deporte, Sebastián Palacios, de destinar 24 millones de dólares para los gastos administrativos y de operación, pero con la advertencia de que el dinero no estaría disponible hasta marzo o abril de 2024, cuando él ya no se encuentre en su cargo.

En su tuit, el alcalde de Guayaquil expresó su satisfacción por la posibilidad de ser sede de este importante evento deportivo, pero también señaló dos puntos importantes. En primer lugar, destacó que Guayaquil no cuenta con los recursos necesarios para organizar los Juegos Bolivarianos.

En segundo lugar, Aquiles Álvarez subrayó la importancia de la planificación basada en acciones concretas y no simplemente en promesas verbales. Al mencionar la llegada de un nuevo Gobierno antes de la realización de los juegos, el alcalde advirtió sobre la incertidumbre que ello genera. "Vendrá un nuevo gobierno, por ende, no podemos planificar sin saber que va a decidir el nuevo presidente de la República." destacó en su tuit.

Por su parte, la prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, también se pronunció al respecto a través de Twitter, expresando su pesar por la falta de compromiso del Gobierno nacional y destacando las oportunidades perdidas para dinamizar la economía de la ciudad y la provincia.

Aguiñaga consideró que los Juegos Bolivarianos representaban una gran oportunidad para impulsar el turismo, generar empleo y potenciar el desarrollo de la región.

Mientras tanto, la incertidumbre y la necesidad de contar con compromisos y recursos concretos se mantienen como temas clave en el proceso de selección de la sede.