El maquillaje es una herramienta imprescindible si desea realzar su apariencia y también hay aquellos que lo utilizan para darle un ‘boost’ a su confianza. A veces no basta con tener pocos y compran muchos. Pero sea sincero consigo mismo, seguirá usando los mismos de siempre sin mirar si tienen o no fecha de caducidad y sin reparar en el daño que puedan ocasionar.

“La piel es el órgano más extenso que tenemos”, explica la cosmiatra Candy Sánchez, “ y también es la más expuesta a factores externos, por eso se le debe brindar un mayor cuidado”. Por lo tanto, cada producto que utilice para el cuidado es recomendable elegirlo meticulosamente.

Las sombras, labiales, rímeles y blush caducan, enfatiza la experta, por eso si alguno de ellos lo tiene abierto, o quizás guardado, por más tiempo del estipulado en sus indicaciones, haga un alto a esta costumbre y deshágase de ellos porque “los productos caducados pueden causar irritaciones, dermatitis de contacto o eczema. Además de cambiar la textura y el olor”.

Hay que mencionar que si el cosmético le ha servido por años sin efectos adversos en su piel es probable que no vaya a pasar nada. Sin embargo, en otros casos, solo es cuestión de tiempo para que los efectos secundarios se hagan visibles.

Los daños que más se presentan son el envejecimiento prematuro, porque los productos en mal estado deshidratan el cutis, adicional a esto es posible que aparezcan alergias y acné.

La especialista compartió con SEMANA algunas recomendaciones de cómo cuidar sus artículos de belleza.

• Cuanto duran aproximadamente

1. Lápices de cejas, labios y ojos: 12 meses
2. Glosses y labiales: 12 - 36 meses
3. Polvo de sombras, blushes, bases sueltas o traslúcidas: 12 - 36 meses
4. Rímel: 6 meses uDesmaquillantes: 6 - 12 meses

• Recomendaciones

1. Caducados. Es muy probable que ese costoso lápiz labial que solo usa en ocasiones especiales haya cumplido su tiempo de vida útil. Por eso, verifique la fecha de caducidad en la descripción que por lo general tiene la forma de un envase con la tapa abierta.
2. Refrigerarlo no es la solución. Algunos productos que son a base de gel requieren de refrigeración, A pesar de esto, no todos necesitan de temperaturas altas. Algunos creen que por conservarlos de esta manera le van a durar más tiempo, pero es posible que manifiesten una reacción contraria y terminen precipitando (hacer sólido un líquido) sus componentes, y ya no le sirva de la misma forma.
3. No los bombee. Se preguntará ¿Por qué los rímeles y glosses se secan tan rápido? Esto ocurre cuando le entra mucho aire al producto. Bombearlo para ‘sacar más’ solo provocará resequedad. En este caso, lo ideal es mover el aplicador hacia los lados en círculos.
4. Las especialistas los eligen así. A la hora de escoger el maquillaje la cosmetóloga Sánchez recomienda verificar que en su composición no tenga un componente abrasivo para la piel, la fecha de elaboración, el aroma del producto y su aspecto.
5. Piense bien dónde los va a almacenar. El calor del sol y mucha humedad alteran las reacciones de los químicos. Por eso, evite guardarlos en el baño. Asegúrese de ubicarlos en un lugar seco y lejos de una ventana.
6. Limpie los aplicadores. Para mantener una piel libre de agentes dañinos es ideal que al menos una vez por semana lave con jabón (no importa cuál) las brochas, esponjas y toallitas que están en contacto día a día con su rostro. Así evitará la proliferación de bacterias que causan acné.