Cuando Jéssica Camejo supo que su hijo Dorian tenía leucemia, sintió que el dolor le carcomía. Quería llorar, pero debía ser fuerte. No hacía otra cosa que rezar y pensar en la forma de motivar a su pequeño. En uno de esos días se le ocurrió crear una página de Facebook a la que llamó Fuerza Dorian. Amigos y familiares comenzaron a enviarle mensajes, hasta que de pronto llegaron videos de varios países. Cada día había más gente que quería darle ánimo a su pequeño.

Dorian se emocionaba, pero con el tiempo sintió que el cáncer estaba ganando la batalla y su deseo era que otros niños como él sintieran también que habían personas apoyándolo.

Él se había vuelto un ejemplo para su familia. Lo vieron llenar poco a poco una alcancía. Le dolía ver cómo las familias de otros niños no tenían ni para comer y mucho menos para la medicina y quería colaborar de alguna manera.

El pequeño falleció a los 9 años en septiembre de 2016 y desde entonces Jéssica y su esposo Dino Campaz transformaron ese dolor en solidaridad, dando vida a la fundación Fuerza Dorian. Y aunque por estos meses la pandemia ha puesto obstáculos a su labor, lograron obtener apoyo y llegar a 300 familias con kits de alimentos.

Ahora se enfrentan a un nuevo reto. Organizan una rifa virtual con la que buscan dar una nueva oportunidad a Camila, de 9 años, y Armelys, de 10, quienes necesitan viajar a España junto a sus padres para recibir un transplante de médula. Tienen leucemia.

Saben que juntar el dinero que les falta para ese traslado es una meta ambiciosa (más de 2.500 dólares), pero esperan al menos apoyarlos con una buena parte de lo que necesitan.

Además, esa rifa busca obtener recursos para armar kits de alimentos para familias de niños con cáncer, pues muchos padres que vivían de sus ingresos diarios, se han quedado sin trabajo por la pandemia. También hacen campañas para conseguir medicinas.

Los voluntarios están sorprendidos con el apoyo que han logrado. Hay estilistas, odontólogos, reposteros, artesanos, diseñadores de mascarillas y cintillos que se han unido a esta tarea. Ofrecen sus productos y servicios como premios para la rifa. Hay también parrilladas, cursos de automaquillaje en línea, arreglos de globos y servicio de mantenimiento de computadoras.

El sorteo será virtual, el próximo 10 de agosto en vivo por Instagram. Y luego vendrán más propuestas, pues no quieren dejar de apoyar a los niños que están necesitando comida y medicinas. Quieren seguir transmitiendo esa fuerza que les inspiró Dorian.