Durante las distintas etapas de la vida, todas las personas han experimentado malos momentos que a veces se acumulan y llegan en combo: perder el empleo, un accidente, un desengaño amoroso, un viaje que se frustró, un emprendimiento que quiebra, en fin; situaciones para muchos frustrantes y que son calificadas de ‘mala racha’ o ‘mala suerte’.

Para la psicóloga Susana Osorno, dichas experiencias son crisis normales y necesarias que forman parte de la vida y que de una u otra manera fortalecen al ser humano.

La forma de reaccionar ante un evento que ‘sacude’ va a depender de la personalidad. Hay quienes son muy sensibles, lloran, se lamentan y ven siempre un panorama desalentador; mientras otros superan cualquier adversidad. “Son personas mucho más resilientes que, luego de analizar esa difícil circunstancia, ven en ella una ventaja, un aprendizaje, un nuevo amanecer”, recalca Osorno, quien ofrece algunas pautas sobre qué hacer cuando se atraviesa por una crisis o ‘mala racha’.

¿Qué hacer?

• Un aprendizaje

Vea en cada crisis, una prueba o aprendizaje del que puede salir adelante. Que deberá modificar su proyecto de vida, sí, pero siempre con la certeza de que le irá mucho mejor.

• Elija seguir

La vida es como un viaje en el que no puede quedarse en la misma estación porque fue maravillosa. O si fue triste, salir huyendo. Usted debe seguir y disfrutar de cada estación pase lo que pase. Porque en cada parada puede aprender, crecer y conocer.

• Planee bien su vida

Disponga de un plan de vida y sepa que hay variables que dependen de usted, pero otras no. Y que, pese a ello, debe seguir tras sus sueños, porque tiene las habilidades y el conocimiento para conseguirlos.

• Expectativas reales

Procure ser positivo, pero tampoco sobredimensione las cosas y genere expectativas irreales porque se quedará con la sensación de ‘tengo mala suerte’. “Son solo ciclos que no se van a dar, que se cierran antes de tiempo o que no se dan como usted los imaginaba”.

• Los sentidos y la realidad

Las personas ven la realidad según sus sentidos. Si se adapta a ver solo malas noticias y cosas tristes, recordar malos olores o sabores, ¿qué le va a deparar la vida? Prográmese para hacer de su vida algo mejor.

• Mente positiva

Esfuércese por ser positivo siempre. Cuando los pensamientos negativos lo acechen, deshágase de ellos inmediatamente, no les permita tomar el control de sus acciones. Los padres o abuelos que cuidan a los niños deben hacerlos positivos en toda circunstancia.

Recuerde...

• No sume a su vida problemas que no son suyos

Si tiene una familia que ama, preocúpese por ella. Claro que puede ayudar a otros, pero no haga suyos los problemas de su compadre o de su mejor amigo. No se sobrecargue de más angustias de las que ya tiene.

• La superstición

Hay personas que se dejan llevar por la superstición y califican estos sucesos como ‘de mala suerte’; mientras otras lo ven como una prueba de su Creador y salen adelante; y otras ante las crisis tan fuertes que pasan solo analizan las formas de salir de ellas, sin darse tiempo para pensar que es por ‘mala racha’.