Peter Schwaiger, jefe de la Misión de la Unión Europea en Ecuador, fue definitivo. La única alternativa que tiene el país es firmar el acuerdo comercial con el bloque, hasta diciembre.

No habrá, reiteró, extensión de las preferencias arancelarias, que se aprobaron en 2014 y entraron en vigencia el 1 de enero del 2015.

“No hay plan B. Lo único que queda es concretar el acuerdo comercial con la Unión Europea”, dijo el diplomático, ayer, en Quito.

Según él, es inaplicable una nueva extensión porque lo que se hizo antes con Ecuador (la extensión) fue un caso excepcional. Esto, a sus ojos, no podría volver a darse, además de que tomaría mucho tiempo.

El diplomático contó –tal como publicó EXPRESO– que la Comisión Europea, el 4 de abril envió el acta legislativa al Consejo y al Parlamento Europeo, para que sea revisada.

Esos dos organismos se han comprometido a agilizar los trámites para que el acuerdo se concrete hasta finales de año.

Dijo que Ecuador también se comprometió a adecuar la legislación a los términos que contiene los acuerdos logrados en Bruselas, el año anterior.

¿Las medidas arancelarias anunciadas por el Gobierno para el segundo semestre podría afectar el acuerdo? “Cualquier medida que adopte Ecuador debe estar sujeta a lo que establece la Organización Mundial de Comercio (OMC)”, respondió Schwaiger. RRG