Una relación de diez años en peligro. Los transportistas de pasajeros “dicen que están a punto de distanciarse del Gobierno”. La decisión se tomará mañana en Portoviejo.

Ellos tienen una larga lista de quejas en contra de las autoridades. El no pago del subsidio por la tarifa reducida en beneficio de las personas con discapacidad, estudiantes, tercera edad; el pago del bono de chatarrización; el control de la informalidad, y el manejo de competencias por parte de los municipios, por ejemplo.

Todos ellos son compromisos que, explicaron en un comunicado, el oficialismo ha incumplido.

“Existe malestar en las bases de las federaciones ante la falta de acción del Gobierno”, aseguró Abel Gómez, presidente de la Federación Nacional de Cooperativas de Transporte Público de Pasajeros (Fenacotip).

Y, a esa lista, se suma la intención de un grupo de legisladores de Alianza PAIS de reformar la Ley de Tránsito para crear una nueva modalidad de transporte; denominado “furgonetas interprovinciales”. Eso, creen los transportistas, perjudicará a las cooperativas que cubren ese sector. Por eso lanzaron la advertencia.

Hasta ahora, el gremio del transporte es el único que se ha mantenido unido y cerca del Gobierno. Tienen tan buena relación que, la semana pasada, en una reunión con el ministro de Transporte plantearon otro listado de peticiones para el sector: un mecanismo de compensación por la elevación del IVA al 14 %, una superintendencia para el control de la venta de repuestos y la afiliación al Seguro Social, tal como publicó EXPRESO.

Entonces los presidentes de la Federación de Taxis Ejecutivos, Fernando Valdés, y de la Federación Nacional de Transporte Liviano, Mixto y Mediano, Napoleón Cabrera, aseguraron que, a diferencia de otros trabajadores, los transportistas no están divididos en su apoyo al Gobierno.

Las federaciones de transportistas debían reunirse para elaborar un documento con propuestas que serán presentadas al presidente de la República, Rafael Correa, a fin de mes.