Sentados en un predio desolado del recinto Cabuyal de Santa Lucía, Polo Ortega y su hijo Vicente, lamentaban el faenamiento de sus cuatro caballos de raza; que, luego de ser robados de su hacienda, fueron encontrados despostados, la mañana de este 17 de  febrero de 2024.

Ortega, de 54 años, encontró las sogas y huesos de sus corceles a diez kilómetros de su domicilio, en una cabaña abandonada, a pocos pasos y debajo de un árbol de ciruela habrían sido faenados.

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Tras el hallazgo, el humilde ganadero comunicó el hecho a la Policía y Fiscalía, cuyo personal llegó al sitio para levantar todos los indicios.

Los caballos estaban valorados en más de 10 mil dólares y eran los campeones de los rodeos montuvios y cabalgatas de la Costa, desde hace una década. “En las provincias de Bolívar, Los Ríos, Manabí y Guayas, habíamos ganado decenas de trofeos, medallas y dinero, por las destrezas que nuestros animalitos hacían en todos los eventos públicos ecuestres. Por envidia se los robaron y los mataron”, consideró Vicente Alvarado, hijo del perjudicado.

La Fiscalía realizaba varias diligencias para identificar a la banda de cuatreros que está operando en esta zona y determinar en qué mercados o tercenas están vendiendo la carne.

Mayra Moyano, ganadera del cantón Nobol, recordó que estos caballos eran muy adiestrados y en todos los eventos que participan se robaban los aplausos del público, por lo que lamentó el hecho.

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