La producción de paja toquilla en la comuna Barcelona, al norte de la provincia de Santa Elena, lleva más de dos siglos. Las plantaciones de la palma también conocida como ‘fibra natural’ están en las montañas de esta localidad.

(Te invitamos a leer: Cincuenta años después de la desaparición de niños chilenos en Nochebuena )

En la actualidad, en Barcelona existen 800 hectáreas de este cultivo, antes se superaba las 2.000 hectáreas. La disminución se produjo debido al bajo costo que se pagaba por cada bulto de paja toquilla hasta hace una década. Además, los jóvenes comuneros se dedicaron a otros oficios y las plantaciones heredadas de sus ancestros la dejaron perder.

En los últimos años, la demanda de paja toquilla ha crecido mucho y se hace necesario elevar la producción, las 800 hectáreas que se tiene en Barcelona quedan cortas, “nos toca buscar toquilla de poblaciones aledañas como Sitio Nuevo y Dos Mangas, pero es poquísima”, refiere el comunero Carlos Bacilio.

(Además: El Oro: El sector turístico espera un repunte para el feriado de Fin de Año )

El objetivo de los agricultores es extender la siembra de la palma y poder producir más los denominados cogollos del que se obtiene el producto, para ello se gestiona con ONG y entes locales. “Se hace necesario más cultivo de la palma, dice Felipe Orrala, otro de los comuneros, quien pide a las autoridades mayor apoyo para sembrar

¿Quieres leer contenido de calidad? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!