El festejo de inicio de fin de semana que celebraba un grupo de personas en un inmueble ubicado en la avenida Octava y calle Diez, del sector Lomas del sur de Ballenita, fue interrumpido bruscamente a las 03:30 de este sábado 17 de diciembre por cinco sujetos que se movilizaban en un taxi, quienes descargaron una ráfaga de balas contra los asistentes.

Según testigos, los fiesteros respondieron a los recién llegados y se armó una balacera que dejó como resultado a un hombre fallecido. Junto al cadáver quedó una subametralladora que habría sido utilizada por la víctima para defenderse.

El occiso no tenía documentos personales y nadie de los presentes quiso identificarlo. “No sabemos nada. Vayan a buscar a los criminales. Ya estamos cansados de tantas muertes”, eran entre otras las expresiones de los ciudadanos que estuvieron en el lugar.

Estos se negaron a colaborar con más datos para la investigación del hecho. La Policía no descarta que por el cruce de balas haya otras personas heridas, por eso de forma inmediata desplegó indagaciones en diferentes casas de salud de la península.

En el lugar se levantó más de una veintena de indicios balísticos. El fallecido presentó cinco tiros en su cuerpo.

La provincia suma también un centenar de casos de sicariato en lo que va del año. La noche del jueves 15 de diciembre, Nelson Josué Soriano Tumbaco, de 22 años, se convirtió en la víctima cien de las personas que han sido asesinadas de esta manera. Sus verdugos lo sorprendieron en el barrio Gonzalo Chávez, de la parroquia Anconcito.

Uno de los allegados del occiso narró a EXPRESO que Nelson Josué estaba descansando en su casa viendo televisión, cuando recibió una llamada y de inmediato salió con un pariente, minutos después les avisaron que lo habían asesinado.

El coronel de policía Luis Carrión Romero indicó que en esta provincia está trabajando un grupo de inteligencia para dar con los responsables de los crímenes que han aumentado considerablemente en la jurisdicción. Como resultado indicó que se logró la detención de uno de los sicarios que participó en los crímenes de la denominada zona H en La Libertad.

En el caso de la muerte de un joven en Anconcito, ocurrida la noche del jueves pasado, se allanó el inmueble de los maleantes y se encontraron dos motos robadas con las que venían cometiendo los crímenes.

“Estamos tras las pistas de los causantes de las últimas muertes violentas que han ocurrido, el grupo interingencial está trabajando en el postdelito de estos hechos, pero también en la prevención para evitar que haya más víctimas”, expresó el oficial.