Prevenir los conflictos

No es bueno dejarse llevar por atmósferas crueles, sin hacer silencio previamente, activando los pedestales del odio, colocándonos en medio del tumulto como jueces sin clemencia alguna, endiosados a más no poder, deseosos de venganza, cuando lo que hay que ejercitar en estos tiempos tan difíciles es la comprensión y la defensa de los más vulnerables, aunque este ejercicio nos traiga resultados negativos. Por eso, celebro el encuentro entre líderes, sobre todo si es para reducir los arsenales armamentísticos, pues lo que abunda hoy en el mundo son los agitadores que pretenden enfrentarnos, en vez de gobernarnos ciudadanos de paz o mansedumbre.

Víctor Corcoba Herrero