El presidente Guillermo Lasso debutó este 2 de junio de 2021 en el ejercicio de colegislador, objetando parcialmente las reformas a la Ley Orgánica de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial y vetando totalmente la reforma a la Ley de Seguridad Social en lo referente a la conformación del Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Ambas fueron aprobadas por la anterior Asamblea.

Según el mandatario, cuatro artículos y una disposición transitoria de la extensa reforma a la Ley de Tránsito, no estarían en armonía con el marco constitucional vigente, por lo que fueron declarados inconstitucionales por el Ejecutivo.

En la objeción Lasso no admite que las plataformas tecnológicas o aplicaciones móviles de servicio de transporte de cualquier tipo, solamente puedan ser de propiedad de operadoras de transporte poseedoras de títulos habilitantes.

Esto porque contraviene el artículo 66 numeral 15 de la Constitución que promueve el derecho a desarrollar actividades económicas en forma individual o colectiva. “Conlleva también una limitación legal sin motivación técnica de las fuerzas de la oferta y la demanda de estos servicios, situación perjudicial en el contexto de digitalización general acelerado por la pandemia de COVID-19”, señala.

También rechaza la propuesta de que las operadoras de transporte no puedan realizar cambios de socios o accionistas, porque esto atentaría a la libertad de asociación que también consta en la Constitución.

Otro punto objetado de la Ley de Tránsito es lo aprobado en una disposición transitoria por los integrantes de la anterior Asamblea, en el sentido de que habrá una moratoria de dos años en el otorgamiento de títulos habilitantes para la prestación de transporte público y comercial.

Ley de Seguridad Social

Con respecto a la reforma a la Ley de Seguridad Social, el Gobierno decidió objetarla totalmente porque, si bien se intentó diseñar un mecanismo de designación que permite a todos los grupos de afiliados y empleadores a integrar el Consejo Directivo del IESS, en cambio, generó otros problemas que pueden afectar el funcionamiento, solvencia y sostenibilidad de la entidad.

Entre otros cuestionamiento, la objeción total asegura que la propuesta de la Asamblea tiende a politizar la administración del IESS. Propone una presidencia rotativa en la entidad, cuando lo que esta necesita son políticas de continuidad.