Municipios regularan las tiendas de mascotas
Adoptar animales de compañía, no venderlos o regalarlos. Ese es el ‘espíritu’ del Código del Ambiente, que se discute en segundo debate en la Asamblea Nacional.
Adoptar animales de compañía, no venderlos o regalarlos. Ese es el ‘espíritu’ del Código del Ambiente, que se discute en segundo debate en la Asamblea Nacional.
La Comisión de Biodiversidad, encargada de elaborar el proyecto, dio un giro a la tenencia de mascotas para proteger su bienestar y evitar su maltrato. Esos animales pasaron de considerarse objetos a seres vivos, explicó a EXPRESO Soledad Buendía, una de las impulsoras de la Ley Orgánica de Bienestar Animal (LOBA) que se recogió, parcialmente, en el código.
“Es un cambio de mentalidad para mirar de distinta manera a los animales de compañía. Son seres vivos que requieren de cariño y cuidados”, dijo a este Diario.
Con ese nuevo concepto sobre las mascotas, ¿qué pasará con las tiendas de animales?
Según los asambleístas del oficialismo consultados por EXPRESO, esas tiendas tendrán una cuota de mascotas abandonadas para darlas en adopción. “No hay inconveniente con esos negocios, estarán regulados por los municipios. El código pretende evitar el maltrato a los animales en cualquier espacio”, señaló Óscar Ledesma, vicepresidente de la Comisión de Biodiversidad.
El proyecto dice que los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) serán responsables de controlar las tiendas de animales. Sus propietarios tendrán que mantener el ambiente sano y no causar ningún sufrimiento ni poner en riesgo la vida de los animales.
Sin embargo, las organizaciones de defensa de los animales alertaron que hay cuatro temas polémicos en el código: las corridas de toros, las peleas de gallos, la caza deportiva y la posible utilización de animales para experimentos.
Pero la legisladora de PAIS e integrante de la comisión, Pamela Falconí, aclaró que en los dos primeros temas se cumplirá lo estipulado en la consulta popular.
Ella tampoco está de acuerdo con dar vía libre a la caza deportiva. “Este país no es como África, no atrae al turismo para ese tipo de cacería. Eso se eliminará”, ofreció.
Sobre el uso de los animales para experimentos, agregó que existen mecanismos de alta tecnología que no causan sufrimiento ni muerte. “Fue un pedido de las universidades”, explicó.
Pero los animalistas insisten en que la cacería es una práctica sin sentido y prohibida en Ecuador. “Sería una regresión”, advierte Pedro Bermeo, de la Fundación Libera Ecuador.
Sin embargo, el problema sin resolver es qué pasará con la sobrepoblación de mascotas. CMP