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Municipio de Guayaquil, citado este jueves a juzgado por fotorradares de la ATM

Juez aceptó a trámite acción de protección presentada por gremio y ciudadano que cuestionan validez jurídica de funcionamiento de esos aparatos

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Sistema. Un fotorradar que está ubicado en la vía Perimetral, Guayaquil.Archivo

A las 11:30 de este jueves 9 de febrero, están citados el alcalde encargado de Guayaquil, Josué Sánchez; Christian Castelblanco, síndico del cabildo, y Daniel Garófalo, como representante de la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM), para que comparezcan ante el juez Mario Tenemaza, en una audiencia, en la Unidad Judicial Valdivia, en el sur.

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Alcolisti S. A., el ‘eterno’ proveedor de fotorradares de la ATM

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Él tendrá que tramitar una acción de protección presentada el 30 de enero por Christian Sarmiento, presidente de la Federación de Transportistas Urbanos del Guayas (Fetug), y Napoleón Gómez Real, quien buscó un lugar en el Concejo Cantonal en las elecciones recientes. Ellos cuestionan la validez jurídica del funcionamiento de los fotorradares, ya que consideran que las multas de tránsito que se han generado a través de esos aparatos han vulnerado sus derechos.

En el escrito presentado también se pedían varias medidas cautelares, como la paralización de los fotorradares, que se suspendan los procesos de cobro de multas, entre otras acciones. El juez denegó esos pedidos puntuales, pero sí convocó a los funcionarios municipales.

Los accionantes aluden en el documento la investigación “Alcolisti S. A., el ‘eterno’ proveedor de fotorradares de la ATM” y una serie de notas de seguimiento de EXPRESO que han recogido el malestar de ciudadanos por las “fallas de dispositivos”, varias inconsistencias, irregularidades y normativas laxas -que ha reconocido la Agencia Nacional de Tránsito (ANT)-.

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El proveedor vendió fotorradares, semáforos y otros componentes a Guayaquil, por $ 45 millones. El dinero de las multas alimentó esas compras.

DATOS DE LA INVESTIGACIÓN PERIODÍSTICA

Desde 2016 hasta mediados de noviembre anterior, unas 54 mil impugnaciones se han presentado en contra de infracciones por exceso de velocidad impuestas por la ATM, por la vía administrativa. Cerca de un 40 % de esos recursos fueron resueltos a favor de los conductores, de acuerdo con los registros a los que accedió este Diario.

La recaudación de las multas por ese tipo de faltas ha significado ingresos millonarios a la entidad municipal, según un cálculo de este periódico, ante la falta de cifras monetarias absolutas que se solicitaron al área de prensa de la ATM. Desde agosto del 2015 -cuando inició operaciones- hasta octubre pasado, se multó a 527 mil personas (incluye reincidentes), que representarían $ 62,5 millones (sin estimar el descuento a la multa, desde el 2021).

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En el discurso de la entidad de tránsito se asegura que los montos provenientes de multas se destinan a dos grandes rubros: 20 % para cubrir gastos; y 80% para inversiones en obras y servicios, como la compra de cámaras sancionadoras, radares y semáforos.

En la práctica, del valor de las multas por velocidad, unos $ 50 millones tendrían que haberse usado en contrataciones en estos ocho años. En ese tiempo, Alcolisti S. A. obtuvo $ 45 millones en 35 adjudicaciones, es decir, el proveedor de los fotorradares con los que se ha multado a miles volvió a beneficiarse de esos y otros recursos de la urbe.

Lea: Alcolisti S. A., el ‘eterno’ proveedor de fotorradares de la ATM.